Tres inmigrantes consiguieron ayer saltar la valla fronteriza de Melilla y uno de ellos fue detenido por amenazas y resistencia grave a la autoridad tras agredir a un policía local, y por romper la luna de un coche patrulla. Este nuevo salto a la valla se produjo ayer a plena luz del día, sobre las 13.15 horas, en un tramo del perímetro cercano al paso fronterizo de Mariguari. Según informaron a MELILLA HOY fuentes policiales, este intento de entrada lo protagonizó un grupo reducido de inmigrantes. Mientras la Guardia Civil intentaba repeler el salto a pie de valla, un vehículo de la Policía Local que pasaba por la zona se detuvo para prestar ayuda en las inmediaciones de la rotonda ubicada frente al paso fronterizo, en la que confluyen la carretera de circunvalación y el vial de acceso al barrio de la Cañada de Hidum.
Sin embargo, según relataron fuentes del cuerpo municipal de seguridad, los inmigrantes “se abalanzaron” contra los agentes utilizando los garfios con los que se habían ayudado para escalar la valla. Uno de los subsaharianos rompió la luna del parabrisas de un coche patrulla del Grupo Canino (Grucan) de la Policía Local.
Reconocido en el CETI
Los inmigrantes lograron llegar al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), pero el autor de la agresión y la rotura del parabrisas del coche fue reconocido sin género de dudas por la Policía Local como el supuesto autor material de los hechos. Por ello, fue detenido por amenazas y resistencia grave a la autoridad.
Posteriormente, la Policía Local entregó a la Guardia Civil al inmigrante detenido, que pasará hoy a disposición judicial.
Según fuentes de la Consejería de Seguridad Ciudadana, no se registraron heridos entre los agentes y los únicos daños son los que se registraron en el vehículo policial.
El último salto a la valla de Melilla se produjo el 8 de agosto, cuando cinco inmigrantes de origen subsahariano intentaron superar el triple vallado de 6 metros de altura que separa Marruecos de la ciudad y dos de ellos lo consiguieron.
