La formación política Somos Melilla ha registrado un escrito ante la Mesa de la Asamblea de Melilla, alertando sobre cambios en la ubicación de su equipo de comunicación que podrían limitar la grabación de los plenos. La medida, según la formación, busca frenar la difusión de sus intervenciones en redes sociales y constituiría una «censura indirecta».
El Grupo Parlamentario Mixto Somos Melilla presentó un escrito de advertencia de legalidad a la Mesa de la Asamblea, señalando la intención del Gobierno de modificar la ubicación del personal de comunicación en el Salón de Plenos. La formación considera que esta medida busca imponer una “censura indirecta” para limitar la difusión de las intervenciones del diputado Amín Azmani en redes sociales.
El documento, firmado por Azmani, surge tras un debate en la Junta de Portavoces del 27 de noviembre. Según Somos Melilla, el objetivo es confinar a su personal en un lugar sin visibilidad directa, dificultando la grabación de calidad de las sesiones. Jadu Driss, de la Ejecutiva de Somos Melilla, afirmó: “El Gobierno de la Ciudad quiere imponer un ‘apagón informativo’ contra nosotros. Quieren taparnos la boca”.
La formación denuncia que la medida es discriminatoria, ya que Somos Melilla es la única que graba sistemáticamente sus intervenciones para redes sociales. Driss expresó: “Esto no es por ‘organización’ ni por ‘criterios técnicos’. Esta norma tiene nombre y apellidos”.
El escrito invoca la doctrina del Tribunal Supremo, que avala el derecho a grabar las sesiones públicas. Señalan que la señal institucional es insuficiente, ya que no cubre todos los plenos. Driss indicó: “Esto es censura indirecta y es ilegal”.
Somos Melilla advierte que, de persistir la obstrucción, podrían incurrir en delitos de Prevaricación Administrativa y contra el Ejercicio de los Derechos Cívicos. Solicitan mantener la ubicación actual para la captación de imagen y sonido y anuncian acciones legales si se efectúa el cambio.
![]()



