El Sindicato Unificado de Policía en Melilla, mayoritario en el CNP, y que integra a todas las escalas y categorías de este colectivo, mediante la presente nota de prensa, llama la atención sobre la situación límite en la que se encuentra la plantilla de esta Jefatura Superior de Policía, escenario agravado aún más si cabe por la "Caravana Abriendo Fronteras" que arribó a la ciudad autónoma, el pasado martes 18 de Julio con alrededor de 500 personas.
El SUP denuncia la deficiente gestión de personal, la cual se ha visto sustancialmente afectada con motivo del operativo dispuesto con el fin de preservar el orden público en la ciudad, ya que según se reconoce desde la propia Jefatura, la falta de personal en la Brigada de Seguridad Ciudadana, donde la Unidad de Prevención y Reacción -unidad especializada en control de orden público- cuenta desde hace meses con una elevada escasez de personal tiempo que soporta una sobrecarga extra de servicios, ha tenido que ser implementada para el desempeño de sus funciones, por funcionarios adscritos a otras brigadas operativas, con la consiguiente merma de recursos y abandono en otros órdenes de la función policial.
En plena época estival y de "Operación Paso del Estrecho", durante un el tiempo que se mantenga el operativo, numerosas labores de las desempeñadas diariamente por la Policía Nacional en el ámbito de la investigación, en lo genérico y en lo concreto, así como en otras labores ajenas a la seguridad ciudadana, sufrirán en detrimento de éste dispositivo, un estancamiento que sin duda tendrá un reflejo en el servicio prestado al ciudadano, al tiempo que inevitablemente acumulará y sobrecargará de trabajo al resto de Unidades de la Jefatura.
Desde el SUP, se ha trasladado oportunamente de forma interna, el malestar existente en la plantilla por el hecho que supone "desmantelar temporalmente" diferentes servicios policiales, pilares en la seguridad ciudadana de Melilla, al tiempo que se critica la falta de planificación ante la llegada de esta Caravana de la cual se tiene conocimiento desde hace más de seis meses. Es por ello que, cualquier deficiencia en la prestación del servicio a la ciudadanía o su ralentización, en ningún caso será achacable a los hombres y mujeres Policías destinados en esta Jefatura Superior de Policía, si a la deficiente organización y gestión de los recursos humanos llevada a cabo por parte de los responsables policiales.