Está claro, no es de centro, como buen economista. Cuando he escuchado que el Sr. Ministro de Hacienda llama a los de Podemos, por calificaciones que ellos mismos se dicen ser, va Montoro en la entrevista televisiva y dice que tal es de descafeinados. Resultando que, los aportes naturales de Podemos, según sus propias declaraciones, son de la gente descafeinada y por tal, no son ni de izquierdas ni de derechas.
Lo que quiere decir que si son solo del ciudadano y por sus banderas y dichos se declaran republicanos, más lo dicho de ni derechas ni izquierdas, razonando, resulta que son ¡falangistas! Que emocionante ¿No?; claro que también tendrán que añadir lo de, la tierra para el que la trabaja.
Después viene, lo de la nacionalización de la Gran Banca, o del crédito social bancario y Patria, Pan y Justicia; y será en este caso donde tendrán que ver de añadir, lo de por una vivienda digna, con el fin de que los Ayuntamientos no vendan a los buitres y sus fondos, las viviendas que se hicieron de Protección Oficial, hayan sido por el Ministerio de la Vivienda (las del Yugo y las Flechas) Ayuntamiento y Obra Sindical (la de las Espigas) o las menos VPO hechas en esta democracia que, es donde está el meollo de la cuestión. Pero ante la especulación capitalista neo-liberal, si el Ayuntamiento o Autonomía vende, rompiendo el compromiso dado a los inquilinos, entonces, sólo entonces, el fondo buitre (como ya ha pasado) se pasará la Vivienda de Protección Oficial por el "forro" y volverá inmediatamente a encarecer el alquiler o lessing de la misma, con lo cual puede llegar el desahucio por dificultad en el pago.
No estaría de más ver y comprobar el contrato y su compromiso, para ver de parte de quién está la sin razón, si del Fondo Buitre o de los Ayuntamientos y ver quien ha de pagar el desamparo legal, sin necesidad de tener que pagar el desahuciado, las tasas al Ministerio de Justicia, camino de las "manos" del Sr. Montoro.
Sabe éste dónde está el Centro de "ni de izquierdas ni derechas" o lo que él llama descafeinados. Por lo que se me ocurre el pedirle que, por favor, no tomen mucha cafeína los descentrados… No sabemos si Podemos tendrá el poder del centrado y que toda la demostración de fuerza en La Puerta del Sol y aledaños, le dé la suficiente fuerza para llegar al poder, pero he de reconocer que su presencia y presión es cuestión del desequilibrio que, ya dije en su día, y por el cual ¡Ahora! Hay que equilibrar mucho más las intenciones que se han de poner en marcha, siendo ésta cuestión la principal asignatura de Rajoy y de todos los populares de centro que, como yo, con mi voto tengo que evitar el desmadre. Porque si hay que equilibrar, tiene que ser dando más peso y mayor poder adquisitivo o más puestos de trabajo por parte del empresariado al trabajo, ya que el Estado como tal y dada la desamortización exigida por la UE y el mercado liberal en el que nos hemos metido , no puede absorberlo. Por lo que estoy viendo que, aún perdiendo "minutos" para el bocadillo o fichando la entrada y salida en la empresa, por aquello de la perdida de horas de trabajo, el trabajador, sea por cuenta ajena o de la Administración del Estado, va a ser el que tenga que recuperar esos 2 millones de puestos de trabajo que se perdieron en su día por culpa de los "brotes verdes" cuando resultó después que el gobierno de Rajoy tuvo que salvarnos del llamado "rescate" que, si no, estaríamos a la griega.
No se rían, que la UE es capaz de forzarnos en todos los sentidos. Y es aquí, donde se debe de forzar al capital a través de sus empresas a que por una mayor mecanización o robotización, amplíen la producción, creando a su vez más puestos de trabajo. Si no será mejor volver al azadón y al dictado, ante la imposición del robot. O eso, u otro impuesto participativo más que compense al Estado o la Seguridad Social en el Fondo de Jubilación o de la Prestación por Desempleo, por los puestos de trabajo perdidos. A fin y al cabo paga el consumidor y paga más el que más gasta o puede.
La cuestión es muy simple, si quieren vender en España, que compensen o fabriquen aquí. Y esto debiera intuirse en las palabras del Presidente sobre la llamada re-industrialización. Mientras tanto tenemos muchas dudas sobre si podemos o no podemos, porque no hay nada de nada sobre la mesa, sólo palabras, palabras que según las circunstancias se las lleva el viento. Y da la casualidad que de ventarrones estamos hasta las narices… S e ú o.
