Un individuo iba a ser juzgado ayer por un delito de atentado contra la autoridad. No obstante, el contenido de una grabación provocó la nulidad del juicio, ya que en el audiovisual era el agente quien aparecía golpeando al acusado, y no al revés, como se había denunciado. Un individuo iba a ser juzgado ayer por cometer presuntamente un delito de atentado a la autoridad. Según se denunció, éste había golpeado a un agente de la Policía Nacional cuando se encontraba detenido en los calabozos. Sin embargo, el visionado de una grabación dio la vuelta al caso, ya que en el audiovisual era el funcionario quien aparecía agrediendo al acusado, y no al revés, como se había denunciado.
Tras esta nueva prueba, la juez declaró la nulidad del caso, ya que éste será devuelto a la fase de instrucción, que es aquella en la que el juez de instrucción realiza todas aquellas intervenciones destinadas a averiguar el hecho delictivo y las circunstancias que lo hayan rodeado. La grabación volverá a ser revisionada con el objetivo de dilucidar si el acusado agredió al agente antes de que éste le pegase, o si, por el contrario, el policía cometió un delito de abuso de poder.
