El sindicato de Enfermería SATSE, afirma que el Ingesa en Melilla está parcelando los contratos de los profesionales contratados para cubrir bajas, algo que además de incurrir en "fraude de ley", impide a estos trabajadores cotizar a la seguridad social y poder concurrir a las bolsas de trabajo. Señalan que no es la primera vez que este tipo de comportamientos se producen ya que en su momento se denunció esta práctica ante la Inspección Provincial de Trabajo y la Seguridad Social. Además el sindicato acusa a la Dirección Territorial del Ingesa de intentar privatizar el servicio de cocina del Hospital Comarcal. Asegura el sindicato SATSe que el Ingesa "vuelve a utilizar contrataciones en fraude de ley, porque utiliza trucos legales para conseguir un resultado contrario al que la propia ley pretende".
Parcelas
Según explican, lo que ocurre es que INGESA "está haciendo contrataciones de sustituciones de un mes por ejemplo, pero parcela el contrato en cinco o seis partes, de manera que durante ese mes la persona contratada está varios días, los que legalmente corresponderían a sus descansos, sin cotizar a la seguridad social y además, con el perjuicio añadido de que durante ese periodo de tiempo no pueden ser llamados de la Bolsa de Contratación si sale otro contrato porque, en teoría, están contratados durante el mes entero".
Consideran que esta práctica, que afirman se aplica desde la Dirección del INGESA en Madrid, "es intolerable". El sindicato recuerda que hace unaño denunció "esta penosa e irregular situación a la Inspección Provincial del Trabajo y Seguridad Social, así como a la gerencia y al propio director del INGESA, Díaz Melguizo, el pasado mes de enero, de modo que dejamos de detectar nuevos casos pero, lamentablemente, el INGESA vuelve a las andadas".
Reitera SATSE que estas contrataciones en "fraude de ley no se ajustan a derecho, en absoluto". Lo adecuado para sustituir la ausencia de un profesional, "cosa que se hace en un 38% de los casos aproximadamente", lo correcto sería "expedir un nombramiento por la causa correspondiente y con duración hasta la fecha de incorporación de este profesional sustituido". La actuación de la Dirección del INGESA de Madrid supone "un fraude de ley o desviación de poder, toda vez que la duración de los nombramientos que se ofertan no corresponde con la duración de las causas reales que los motivaron".
Los responsables del INGESA "dicen gestionar conforme a la legalidad vigente, y velar por la calidad asistencial de los usuarios del INGESA de Melilla cuando la realidad es que, solapada y gradualmente, están llevando a cabo un recorte de personal y de contrataciones, lo que supone un abuso en las condiciones laborales de su personal temporal y un desgaste enorme para la, ya de por sí, sobrecargada plantilla", afirma el sindicato.
Privatización
Asimismo denuncia el sindicato que el INGESA está llevando a cabo "una privatización encubierta del Servicio de Cocina del Hospital Comarcal, jugando con la plantilla orgánica de personal estatutario como si la plantilla del INGESA fuera la de una empresa privada". Esperan que "alguien ponga freno a las pretensiones privatizadoras de Díaz Melguizo, pues SATSE teme que esta tendencia a la externalización de los Servicios se generalice en el Hospital Comarcal o en el nuevo Hospital Universitario si es que, algún día, éste se llega a poner en funcionamiento".
Lo que resulta "penoso" es que no se tenga en cuenta para nada "el malestar del personal del INGESA, ni la sobrecarga asistencial generalizada que se padece, siendo en áreas como las de Urgencias o el Área obstétrico ginecológica desbordante e inasumible por más tiempo para su personal". En opinión de SATSE, los gestores del INGESA demuestran cada día, "lo que realmente les importa: medrar en sus cargos a costa de apostar por medidas economicistas, que repercuten negativamente en la salud laboral de los profesionales y en la salud de los pacientes que estos atienden día a día".
