Francisco Robles, director territorial de Ingesa en Melilla, dijo estar "decepcionado por la actitud" y declaraciones de la presidenta de la gestora del PSOE local, Gloria Rojas, que responsabiliza al cien por cien al PP del retraso en la construcción del nuevo hospital universitario porque "no es cierto". Robles dijo que él asumía su "parte de culpa" pero que los socialistas deben hacer otro tanto, en especial porque fue el Gobierno de Zapatero el que adjudicó precisamente la dirección facultativa que ahora la justicia ha echado atrás dando la razón a la empresa denunciante. "Es incierto todo", así de rotundo se mostró ayer el director territorial del Ingesa en Melilla, Francisco Robles, a la hora de referirse a las acusaciones de Gloria Rojas sobre que el cien por cien de la responsabilidad de la paralización de las obras del nuevo hospital es del Partido Popular y que si ya fuese una realidad, se habría evitado el gasto en la rehabilitación del centro de salud de Polavieja. "Me han sorprendido los titulares de Gloria Rojas. Me ha decepcionado, porque pensaba que en una persona nueva, habría cambios en las declaraciones", dijo.
Aseguró Robles que al PP "nunca se le puede achacar el cien por cien de la responsabilidad". Dijo que él fue "generoso cuando pedí perdón a los melillenses porque alguna culpa tendremos los populares, pero no toda". De hecho, manifestó que los socialistas deberían leerse la amplia documentación que ha generado el nuevo hospital y las sentencias judiciales dictadas en este tiempo, pero en especial recordar que fue en tiempos del Gobierno Zapatero cuando "ocurrió esa mala decisión de firmar las resoluciones de la adjudicación provisional y definitiva de la dirección facultativa de la obra en contra de los informes de la asesoría jurídica y de la Intervención Delegada de Ingesa". Por ese motivo el juzgado "da la razón a la empresa" que denunció estos hechos, de ahí la nueva paralización en el reinicio de los trabajos de construcción. Pero esta parada "no será de meses" como ha ocurrido. Espera que después del verano las obras se retomen por fin.
Por todo ello "rechazo la mayor de la responsabilidad del cien por cien, porque aunque generosos compartimos" la culpa "ni mucho menos la parte que le corresponde al PSOE, que fue el que aprobó el modificado, adjudicó la obra por un precio infinitamente inferior al que tenía, el que adjudicó la dirección facultativa contra los informes jurídicos y de intervención".
En cuanto a que se incluyera el traslado del centro de salud de Polavieja en el proyecto del nuevo hospital, manifestó Robles que "nunca dejó de ser sólo una idea, una intencionalidad". Además "por supuesto no había reserva de espacio, ni crédito, ni proyecto arquitectónico que sustentara esa idea", por lo que la crítica de Rojas es "algo gratuito". Añadió que si el actual equipo de gestión del Ingesa no hubiese aprobado la remodelación de Polavieja "tendríamos ahora un centro de salud de cuarenta años sin soluciones de vida, al tiempo de que estamos preocupados por dotarle de personal y recursos técnicos para para que no baje la calidad asistencial que se ofrece".
