La Guardia Civil ha descubierto en Melilla a nueve inmigrantes marroquíes, cinco de ellos menores de edad, ocultos en un doble fondo de un semirremolque que iba a embarcar a la Península y que estaba estacionado en el puerto comercial sin ninguna carga. Según informó la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla en una nota de prensa, la presencia de estas personas fue detectada en el control rutinario que realiza la Guardia Civil en el interior del puerto comercial de los containers, bateas, camiones y otros elementos de carga, preparados para embarcar en los buques de retorno a la Península.
El hallazgo se produjo al detectar el can detector de personas la posibilidad de encontrarse personas ocultas, lo que dio inicio al protocolo establecido. El doble fondo fue realizado por el traficante o traficantes de seres humanos, que aún no han sido detenidos, al superponer un panel de chapa de las mismas características que el original, al final del habitáculo de carga, fijándolo con una estructura de madera y pintándolo por fuera del mismo color para no delatar la manipulación.
La Guardia Civil supone que se habrá realizado en algún lugar de la ciudad, fuera del puerto, donde se deja estacionado tras la descarga de la mercancía.
El hueco construido en su interior, en el que fueron halladas a las nueve personas, tiene unas dimensiones de 0,70 metros de profundidad, por 2,45 y 2,50 metros de alto/ancho, aproximadamente. Los nueve inmigrantes fueron rescatados y auxiliados a salir “de tan exiguo habitáculo”, y todos se encuentran en buen estado de salud.
En el interior del habitáculo construido, la Guardia Civil también localizó agua y diversos alimentos para la travesía. Las personas auxiliadas son todos ellos varones, de nacionalidad marroquí, cinco de ellos menores de edad, que fueron puestos a disposición de los Servicios Sociales de la Ciudad Autónoma.
Los adultos, indocumentados, fueron puestos a disposición del Cuerpo Nacional de Policía, en aplicación de la vigente Ley de Extranjería.
