El Atlético Melilla, tras remontar un partido que se le puso cuesta arriba, aún sueña con la posibilidad de mantener la categoría, aunque para ello depende de que el Atarfe Industrial no gane hoy al San Pedro. Un triunfo de los granadinos convertiría en estéril el logrado ayer por los de Ramos. El Atlético Melilla sumó ayer tres nuevos puntos, tras derrotar al Guadix C.F. por el resultado de 3-2. Un gol de Yosef, al transformar un penalti, dio la victoria a los melillenses en el tiempo de descuento.
El primer periodo no resultó nada vistoso para los aficionados, con poco juego y escasas ocasiones de gol. No en vano, hubo que esperar hasta el minuto 24 para poder contabilizar la primera oportunidad clara, con un tiro cruzado de Cristiano, que tocó en un defensor local y obligó al meta David a despejar con apuros.
Ese fue el preludio del 0-1, que llegaría nueve minutos más tarde, con un gran disparo de volea de Joselu, desde la frontal del área, que entró por la misma escuadra. Sin duda, un auténtico golazo. Los melillenses, por su parte, sólo generaron una ocasión de peligro, en concreto en el minuto 41, con un remate ajustado de Jesús Puerto que se marchó al palo, tras un excelente servicio entre líneas de Moha. Sin tiempo para más, y con el consabido 0-1, llegó a su finalización el primer periodo.
El arranque de la segunda mitad fue un calco a cómo se había desarrollado la primera. Sin embargo, a partir del minuto 10 los de Alejandro Ramos parecieron hacerse con el control del juego y las llegadas fueron más continuas sobre el portal granadino. Así, en el 58’ Riduan, tras marcharse de varios contrarios dentro del área, se plantó ante el portero Álex, al que batió con un remate fuerte y colocado. Los locales se envalentonaron y, un minuto después, pudieron conseguir el 2-1, en una gran internada por la banda derecha de Farid, quien centró al punto de penalti y Chiby tiró fuera cuando lo tenía todo a su favor.
El Guadix, muy agazapado atrás, fue capaz de volverse a poner por delante en el marcador, con un disparo desde prácticamente cuarenta metros de Darío, que no se lo pensó viendo que David estaba bastante adelantado. Un jarro de agua fría para los de Alejandro Ramos, que, sin embargo, no bajaron los brazos. De este modo, Riduan, en al 79’, ejecutaba una falta lejana y escorada que, merced a un grave error de Álex, significaría el 2-2. Y cuando parecía que el choque acabaría en empate, el colegio señalizó un penalti a favor de los ‘atléticos’, por una falta cometida por el portero accitano sobre Salah al salir a despejar un balón. Yosef, en el 93’, se encargó de transformar la pena máxima, dándole el triunfo a su equipo (3-2).
