Suma y sigue. Sobre quinientos congresistas (entre ellos el Jefe de Gobierno, Abdelillah Benkirán, miembro del Consejo de la Shura con el nº 38) reunidos en el céntrico teatro Mohamed V, aplaudieron frenéticamente a eso de las 11.30 de la mañana, primero la presencia del portavoz palestino de Hamás (organización que no vamos a calificar pues ya se define por sí sola) y segundo con no menos entusiasmo la del vicepresidente del movimiento tunecino Ennahda, Abdelfatah Moro, sentado en primero fila y simbólicamente (la apreciación es mía) a la derecha del presidente del Gobierno marroquí. ¿Un mensaje a varias bandas…? Ya se lo había advertido ayer, pues para este escribano del limes la sintonía ideológica entre los islamistas parlamentarios del PJD (Partido de la Justicia y el Desarrollo) y su brazo religioso el MUR (Movimiento de Unicidad y Reforma) con sus correligionarios de Ennahda viene de lejos. Como destacó el todavía presidente del MUR, Hamdaoui, “hemos trabajado mucho para conseguir la presencia de movimientos hermanos de África y el mundo árabe”. Objetivo conseguido ¿Una Internacional Islamista en ciernes…? Haberla, como las “bruxas” de la tierrina, hayla ya. Sencillamente podría estar abordándose una nueva formulación. Junto a Hamás (también asistió el embajador de la Autoridad Nacional Palestina) y Ennhada, había una florida representación de Sudán, Mauritania, Mali, Senegal, Arabia Saudí, Turquía e incluso de Europa y los Estados Unidos, siendo llamativa la ausencia de los proscritos Hermanos Musulmanes egipcios, a los que por cierto tanto apoyó el MUR cuando el general Al Sissi se vio obligado a dar su contragolpe.
¿Caras conocidas….? Unas cuantas. Desde el tetuaní Amín Boujoubza (uno de los históricos), a los ministros Ramid (que ayer paró su coche oficial para darnos un apretón de manos) y Khalfi, el delfín de Benkirán, además de un sonriente Lahcen Daoudi quien, rápido él, llegó, saludó y marchó. Kulchi levés.
En cuanto al congreso en sí (el quinto desde 1998, más uno excepcional en 2003), uno de sus grandes desafíos será la elección de un nuevo líder, aceptado por las bases y sin demasiadas estridencias con el poder real del Neomajzén. Según parece los congresistas presentarán (los candidatos no se ofrecen a título personal) cinco candidaturas, especulándose de momento con los nombres de Mohamed Raissuni (ex presidente del MUR “invitado” a dimitir en su momento) y Benhamdane. Anteayer viernes por la tarde y tras unos breves saludos, un discreto Raissuni se mostraba circunspecto y éste sábado, sorpresa, nos informan desde el primer momento que no estará presente en la sesión por “encontrarse enfermo”. ¡Pardiez, con la buena pinta doy fe de ello que tenía ayer!
Por lo demás y en cuanto a las opiniones sobre este importante congreso (del que la MAP, a fecha de sábado, ni se acuerda), espiguemos algunas, destacando en primer lugar la de la competencia, el movimiento alegal de Justicia y Espiritualidad en boca de su portavoz, Fathala Arsalan, claramente elogiosas y sugerentes: “El MUR está haciendo un gran esfuerzo para propagar los principios del Islam en la sociedad”, además “ambos movimientos tenemos muy buena relación y no solo entre los líderes. Somos dos escuelas diferentes pero compartimos muchos principios comunes”. ¿Mano tendida para una colaboración conjunta en el horizonte? Eso parece. Tampoco tienen desperdicio las de los salafistas Abou Hafs (quien ayer sábado se acercó al congreso a eso de las 10.15) y Hassan Ketani, coincidiendo ambos por cierto en una crítica, en síntesis: “El MUR se ha interesado demasiado en los últimos años por la política y debe volver a retomar el discurso religioso”. Y si Abou Hafs destaca la activa participación del MUR “en la conservación de la identidad musulmana y en la protección de los Santos Lugares así como en la defensa de las cuestiones de la Umma que unen a todos los musulmanes”, Ketani (actualmente presidente de la asociación Al Bassira) destaca la asunción del MUR de los principios de la Shura.
Ramid, ministro de Justicia, apareció ayer mañana relajado y sonriente, pese a las amenazas de muerte que pesen sobre su persona por parte de los fanáticos terroristas de MUYAO (Movimiento por la Unicidad y la Yihad en África Occidental). Y al respecto, el terrorismo de matriz yihadista, otro de los valores del Movimiento de Unicidad y Reforma (MUR) marroquí. Lo reconoce Abou Hafs, que algo sabe de eso: “El MUR está protegiendo a los jóvenes de las ideas extremistas”. Falta hace, Inch´allah.
La noche del sábado barruntaba tormenta, pero al final ésta ha pasado de largo. Rabat sigue vacía de habitantes y en calma, siempre apacible (hermosa ciudad), salvo la diaria concentración de protesta, ya es una tradición, ante el Parlamento. El calor es más pegajoso, pero se sobrelleva. Y por cierto, en la numerosa cartelería y publicaciones sobre Palestina existentes en el congreso, la bandera de la misma es omnipresente sobre todo el territorio. Israel, sencillamente, no existe… Mañana lunes les remato mis comentarios. Sean buenos y felices. Haya salud. Visto.
