El consejero de Coordinación y Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, pidió ayer seriedad a las entidades y partidos políticos que integran la recién creada Mesa de Movilidad y que han manifestado su deseo de firmar un pacto por la Movilidad Urbana Sostenible, ya que esta posibilidad fue ofrecida hace cuatro años por la Ciudad Autónoma. A preguntas de los periodistas, Quevedo dijo que al Gobierno de Melilla “le parece bien” que ahora quieran sumarse a ese pacto, pero dejó claro que la Administración pública no puede trabajar “con una entidad que no existe”.
En este punto, señaló que la Mesa de Movilidad no tiene CIF, ni estatutos ni presidente ni una organización interna, y que sólo cuenta con Facebook y Twitter, por lo que la Ciudad Autónoma “no sabe quiénes son” las entidades que la integran.
Explicó que cuando hace varios meses la Mesa de Movilidad pidió la firma de un pacto por la movilidad, él mismo respondió con un escrito fechado el 1 de julio pidiendo que especificaran qué asociaciones reales integran dicha Mesa, con documentos firmados por sus presidentes y con su aprobación o la de sus directivas.
“Vamos a ser serios, estamos hablando de una administración que no puede tener en cuenta a una entidad que no existe”, subrayó Quevedo, que también aclaró que es él como consejero quien está esperando una respuesta, y no la Mesa de Movilidad, como han dado a entender algunos de sus integrantes.
Afirmó que cuando el Gobierno melillense reciba una respuesta, la estudiará “con todo el interés a pesar de que se produzca con un notable retraso”, para intentar convocar al resto de entidades y asociaciones de la ciudad para impulsar “un pacto por la movilidad representativo de la mayoría de la población y los sectores afectados”.
Empresarios y comerciantes
Se refirió, por ejemplo, a los comerciantes y empresarios, cuya opinión es importante en un pacto por la movilidad que, de lo contrario, “nacería cojo”, pues sólo tendría en cuenta a asociaciones “a las que no les importa que desaparecieran los coches”.
“Si queremos que vaya adelante, hay que hacerlo seriamente y tranquilamente, pero entre todos y contando con todos y no sólo con aquellas personas que puedan estar interesadas”, agregó Quevedo.
Asimismo, pidió tener “un poquito de historia” en este asunto de la movilidad sostenible, ya que él, como consejero de Fomento, hizo varias calles peatonales en el centro de 2004 que, debido a la presión de los comerciantes, hubo que reabrir al tráfico sin que protestara ninguna de las entidades que forman parte de la Mesa de Movilidad.
