Una mujer podría ser castigada a cumplir una pena de seis meses de prisión, además de tener que pagar una multa de 1.080 euros, en el caso de que sea condenada por el presunto delito de falsificación de documentos públicos por el que se le acusa. Una mujer podría ser castigada a cumplir una pena de seis meses de prisión, además de tener que pagar una multa de 1.080 euros, en el caso de que sea condenada por el presunto delito de falsificación de documentos públicos por el que se le acusa.
La mujer no se presentó a la vista, pese a que fue citada legalmente y en forma para que acudiera al juicio que tuvo lugar hace unos días en el Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla. Pese a que no estuviera la acusada, la vista pudo desarrollarse en su ausencia, ya que la pena que se le reclama no supera los dos años de prisión. En el caso contrario, habría tenido que suspenderse.
Un agente de la Policía Nacional prestó declaración a través de una videoconferencia con la sala. Según expuso, el 12 de abril de 2014 advirtió de que la procesada estaba intentando embarcar a un buque con destino a Málaga con una tarjeta de identidad belga que era falsa.
Acuerdo de adhesión
Para el Ministerio Público, la declaración del policía suponía una prueba de cargo suficiente para desvirtuar la presunción de inocencia de la acusada. Por ese motivo, reclamó el dictado de una sentencia condenatoria.
La letrada de la procesada se adhirió a la petición de la fiscal tras llegar a un acuerdo para que rebajara la pena solicitada.
Sólo queda que la magistrada dicte sentencia.
