Lo publicaba el Diario “El Mundo” en su edición del viernes, día 25: “Ante una gran muchedumbre, que atestaba la calle Estroncio, barrio Sanfelliu, en el norte de L´Hospitalet de Llobregat, se celebró el desfile, desautorizado por el Ayuntamiento, de la Hermandad de Antiguos Caballeros Legionarios de Barcelona.
El Ayuntamiento gobernado por el PSC que había prohibido la procesión, pese al rechazo de la mayoría de ediles, como ocurrió hace un año”. “El colectivo de ex legionarios –agrega el rotativo- se manifiesta por el citado barrio tras haber sido expulsado de procesiones de otras localidades en las que participó, manifestando que lo hacen a favor de la libertad de culto”. La multitud se concentra a las puertas de la parroquia de la Inmaculada Concepción, algunas llegaron procedentes de Barcelona. Mientras la gente espera, un ex legionario comenta que cantarán el cabo Luis, Curro, cánticos normales como “El novio de la Muerte”, pero lo hace toda la Hermandad interpretando los himnos de la Legión. Un acto bonito, sin política. Tiene obviamente, reminiscencias militares pero, eso sí, no hay armas en el desfile. Sus desfiles de Semana Santa van en esa dirección. Se trata –dicen con sus camisas verdes semiabiertas- “de limpiar nuestra imagen”. Pero que nadie se equivoque, “Daremos caña cuando toque”. “Defenderemos la Unidad de España, siempre que nos llamen”.
“El presidente de la Hermandad de Antiguos Caballeros Legionarios, (dice Héctor Marín, autor del artículo en “El Mundo”), se dirige a los periodistas para decirles que la Hermandad, que está dada de alta en el Registro de Actividades, se le prohíbe salir a desfilar”, (casos como el de Hospitalet, con motivo de la Semana Santa. Ya es el colmo, opinión yo).
En Barcelona son unos 350 los antiguos caballeros legionarios y todos catalanes, ubicándose su sede desde 1974 en el Paseo Torres i Bages. En el ambiente está todavía el corte de Ada Colau a un militar en el Salón de Educación de Barcelona: “Ahí se vio que algunos gobiernos de ahora improvisan y se ven obligados a rectificar”. “El desfile procesional empieza –dice por último el citado corresponsable- y se oyen grito de ¡Viva España!, y ¡Viva el Rey!- un joven ataviado con la bandera española explica que quiere alistarse en el Ejército y “en la Legión si es posible”. Los demás, por lo que se agrega en la amplia información, transcurre con absoluta normalidad, como no podía ser de otra forma, para satisfacción de la citada Hermandad de veteranos ex legionarios, para quienes les apoyaron y aplaudieron en ese desfile procesional al que el Ayuntamiento de L´Hospitalet puso trabas para impedir su celebración y, por el contrario, para “disgusto” de los ediles que lo intentaron y, por supuesto, para la impresentable Ada Colau, esa a la que el Ejército parece que le revuelve las tripas cuando tenía que ser por otros muchos motivos que ella conoce, pero se los traga.
