La U.D. Melilla dejó sentenciada, en la matinal de ayer domingo, la permanencia en el Grupo IV de la Segunda División B, al superar al C.D. El Palo por 2-0, en un partido en el que los locales disfrutaron de ocasiones, sobre todo en la primera parte, para ganar con justicia al C.D. El Palo. Los melillenses volvieron a mostrar su mejor versión como locales en esta segunda vuelta, en la que han sumado cinco victorias y sólo han cedido un empate, una imagen totalmente diferente a la que muestran como visitantes, con cinco derrotas y un empate.
El primer tiempo fue muy parecido al último partido disputado en casa ante el Algeciras, con un Melilla que perdonó ante el marco defendido por Mikel Pagola para dejar sentenciado el encuentro antes del descanso, aunque antes El Palo pudo sorprender a los nueve minutos, cuando Javilillo se plantó solo ante el meta Munir y éste respondió con una gran intervención, despejando a córner, impidiendo el posible 0-1.
A renglón seguido, el Melilla reaccionó, tras uno primeros compases bastante buenos en cuanto a juego del conjunto malagueño. Los melillenses comenzaron a entrar en juego y a llegar con peligro por las bandas hacia la meta rival. La primera ocasión de los melillenses se produjo a los dieciséis minutos, en un centro de Amarito que remató, de cabeza, Migue Montes a fuera, y dos minutos después un servicio de David Vázquez, por la izquierda, lo estrelló Nacho Aznar al palo, de remate con la testa.
Los melillenses seguían volcados sobre la meta rival y a los veinticinco minutos David Vázquez ejecutó un saque de esquina, rechazó la defensa malagueña en corto, pero Guille Roldán remató en primera instancia para que finalmente Migue Montes, de cabeza, mandase el esférico fuera.
El Palo seguía desbordado ante el acoso azulino, ya que a los 32 minutos Nacho Aznar rompió el fuera de juego, pero se adelantó demasiado el balón y disparó de forma forzada, dándolo tiempo al portero a detener el cuero, y dos minutos después Chota disparó a la medida vuelta, pero el meta Mikel Pagola detuvo en dos tiempos.
Y la última ocasión de esta primera mitad fue también bastante clara, ya que David Vázquez superó al último defensor, se plantó sólo ante el cancerbero malagueño y cuando intentaba pasar el balón para Chota se anticipó el defensor Manolo Gaspar que despejó en corto y finalmente Migue Montes disparó a puerta, mansamente, a las manos de Mikel Pagola.
La Unión Deportiva reanudó el segundo tiempo llevando de nuevo el peso del partido, con el claro objetivo de adelantarse en el marcador y lo consiguió en su primera aproximación sobre la meta andaluza, después de un clamoroso error de un defensor visitante, que falló cuando intentaba pasar sobre un compañero; Migue Montes le robó el balón y se marchó en dirección a puerta, definiendo con gran calidad de preciosa vaselina ante la salida del portero.
Con el 1-0, el Melilla controló el partido, aunque ya no llegaría con peligro sobre la meta rival, sobre todo porque El Palo tiró de casta y empuje para intentar igualar el partido, aunque bien es cierto que los de Juan Moya sólo sufrieron en los últimos quince minutos ante el empuje de un aguerrido conjunto visitante, que pudo nivelar la contienda en el tiempo de la prolongación, en un remate de Guerrit a bocajarro, que afortunadamente Guille Roldán salvó en la misma línea de gol. Precisamente en esta acción se pasó del posible 1-1 al definitivo 2-0, después de que Amarito se hiciera con el balón, pasó sobre Sufian y éste sirvió un pase medido a Manolo, que controló dentro del área y empujó el balón a la red, festejando el tanto con una dedicatoria especial con el masajista Ali y el preparador físico Augusto Hoyo.
