Hoy, 27 de octubre, hace ocho años que llegaste a este Mundo para colmar de alegría a tus queridos padres, Francisco Javier y Montserrat; a tu hermano Javier; a tus abuelos Isolina, María del Carmen y Francisco, a tus tíos, primos y demás familiares.
Fuiste, cuando llegaste, la Bendición de Dios Padre y, actualmente, la felicidad de todos nosotros por el cariño que nos ofreces, por tu simpatía y, sobre todo, por tu presencia diaria en nuestras vidas. Motivos más que suficientes para desearte muchísimas felicidades en día tan señalado y rogarle al Altísimo que te conceda larga vida y siempre colmada de las mejores venturas junto a toda tu querida familia.
Muchos besos de todos nosotros y que lo pases muy bien con tus amiguitos en la fiesta que te han organizado tus padres.
Tus abuelos: María Carmen y Paco Roldán.