A mediodía de ayer celebraba su cumpleaños José María Aragonés en el Restaurante Miguel Benítez. El conocido y querido melillense se encontraba feliz y sus motivos tenía. Lo principal por encontrarse rodeado de su familia entre los que estaban sus mujer Ángeles Ángel, sus hijos José María y Ricardo, su nuera Gema y su consuegra Maricarmen, pero además el otro motivo de su alegría es que los amigos le decían que se conserva con el mismo aspecto risueño y juvenil y con las mismas ganas de cantar que hace muchos años. Todo un síntoma de persona feliz. Que sigas siempre igual, José María.