La Delegación del Gobierno en Melilla cifra entre 500 y 600 las personas de Marruecos que entre la noche del jueves y la madrugada del viernes intentaron acceder de forma irregular a la ciudad, “atacando el perímetro de forma violenta”. En rueda de prensa, la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, dejó claro que van a ser “implacables” en la protección de las fronteras, respondiendo “con toda la contundencia que otorga el Estado de Derecho”, y que no van a “permitir ataques”, por lo que seguirán defendiendo la integridad fronteriza.
Para ello, el jueves por la tarde, pocas horas antes de que comenzara la presión migratoria, se diseñó un dispositivo que reforzaba y ampliaba el que se estaba aplicando por “la evolución de la situación”, el cual cuenta con una dotación “bastante importante” de agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional y el refuerzo de las Fuerzas Armadas en labores de vigilancia del perímetro.
Asimismo, apuntó que anteayer se incorporó una dotación de refuerzo de la Guardia Civil, formada por 20 agentes, tal y como anunció el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el pasado martes.
En estos momentos, se está gestionando la posibilidad de ampliar el número de efectivos tanto de la Policía Nacional como de la Guardia Civil “en previsión de que en las próximas noches, Melilla pudiera padecer algún tipo de entrada como el que se dio anoche” [por anteanoche].
También destacó la delegada del Gobierno el incremento de la vigilancia del helicóptero de la Guardia Civil, para lo que se han programado los repostajes de gasolina, de modo que se pueda optimizar el tiempo “y no se pierda ni un segundo en estas labores”.
Trabajo “ejemplar”
La delegada aprovechó su comparecencia para poner en valor el trabajo “ejemplar” y la profesionalidad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
La “extraordinaria preparación” de los efectivos de Guardia Civil y Policía Nacional, que contaron con la colaboración de la Policía Local y el Ejército, evitó que hubiera heridos y que, del más de medio millar de personas que intentaron acceder a Melilla, solo lo consiguieran 30.
Ello, a pesar del lanzamiento de piedras y otros objetos que se produjo en los seis intentos de entrada que se registraron por diferentes puntos del perímetro entre las 22.00 horas del jueves y las 5.30 horas del viernes en una noche “compleja y difícil”.
La delegada quiso reconocer que “es un orgullo contar con profesionales de la Guardia Civil y de la Policía Nacional” porque “son hombres y mujeres lo dan todo por la defensa de nuestra integridad territorial”.
“Contamos con dos cuerpos policiales admirados y respetados por todo el mundo. Y lo son porque se lo han ganado a pulso”, señaló. Por ello, les agradeció “su entrega más allá del propio deber” y puso en valor la gran labor que hicieron anoche para garantizar la seguridad en nuestro perímetro.
Ninguno localizado
Ninguno de los 30 varones adultos marroquíes que lograron entrar ha podido ser localizado, aunque la delegada del Gobierno aseguró que se procederá a llevar a cabo expedientes de expulsión en el momento que sea posible.
Firmeza
Sabrina Moh hizo hincapié en el respaldo del Gobierno de España, algo que ya trasladó el propio presidente del Ejecutivo central, Pedro Sánchez.
“La preocupación y el seguimiento que están llevando a cabo de lo que sucede desde el Gobierno de España está siendo continuo”, apuntó Moh, que reveló que está recibiendo múltiples llamadas de apoyo de los miembros del Ejecutivo central, así como para cubrir las necesidades que surjan.
Destaca el “papel importante” de agentes marroquíes para contener los saltos de la madrugada del viernes
La delegada del Gobierno, Sabrina Moh, destacó ayer el “papel importante” de agentes marroquíes para intentar contener a los cientos de personas que intentaron acceder a Melilla en la madrugada de ayer. Así, explicó que el coronel de la Guardia Civil estuvo en contacto continuo con el coronel de la Gendarmería, lo que permitió que los agentes del país vecino pudieran “disuadir” a un número importante de personas en su objetivo de entrar de forma irregular a la ciudad.
“Ellos hicieron un papel importante en esa colaboración. Eran cientos de personas y diferentes núcleos, eso hacía más compleja la tarea”, dijo Moh.
