A Don Pedro de Estopiñán, al que han cambiado la postura por el brazo ortopédico, dejando de apuntar su espada hacia el Monte Gurugu, ya que ahora apunta al cielo, cambiando su aspecto de defensor aguerrido por el de misionero en paz. Y yo que estaba mirándole desde la acera de la plaza, frente a las escalinatas que bajan a la Peñuelas, lo veo encima de un retrete verde. Y le híce una foto por si ustedes no me creían. Y pensando yo una vez más, me dije, a quién se le habrá ocurrido semejante color, en desacorde con la piedra de la Ciudad Vieja; por lo menos, si es para servir al negocio del chiringuito, que no sea el del color del "basurero", porque rompe la imagen.
Mientras tanto, esperaba a mi hija mayor salir de sus quehaceres y acción administrativa, pese a los avatares de la dureza de la vida; y mirando yo a la gaviota espléndida que, luciase planeando sobre mi cabeza o mejor dicho, sobre el coche, que por amarillo se creía era la yema de uno de sus huevos, y no, por Dios, que es un Getz ¡pardiez!; revoloteaba ella, la gaviota, luciendo su blanco torso y su timón que, es su cola llena de claras transparencias. Al final, ya posada sobre el banco, hizo sus necesidades y graznando, me miró con un Forum de deseos, invitandome a seguirla como si yo pudiera extender alas y volar contra viento y marea. Qué más quisiera yo… Que hacer vuelo sin motor, el mayor deseo de mi vida, piloto. Que es hélice de mi firma. Y vivía yo de niño con los brazos extendidos por el pasillo de casa, haciendo a dos carrillos el bramido de un motor y tableteo de su ametralladoras de caza. ¡Que barbaridad! Si hoy en día, es todo humanismo perfeccionista y negocios autogestores y cooperativas… fantasmas de un pasado menos corporativista. ¿Se lo cree usted? Yo no, por mucho que se cante "por emprendedores". Cuando nos estuvieron diciendo desde los 83 hasta nuestros días que, éramos una nación de servicios. Y así nos ha ido.
Hoy dice Rajoy que, hay que reeindustrializar España. Y es el único que lo dice; por algo será. Hay que salir de la cola europea ¡ya!, y para que nuestros jóvenes no "vuelen", fabriquen los financieros españoles en España. Si no, intervención del Estado Nacional y a su servicio la banca nacionalizada o … potenciando los fondos ICO, al máximo. Sigo mirando si veré este nuevo despertar de una España considerada por sus mismos capitalistas financieros. Creo que por la edad, no. ¡Suerte lector!
