Los gobiernos de Melilla y Ceuta celebrarán próximamente, en fecha todavía por determinar, una reunión para hacer “un frente común” en defensa del autogobierno de ambas Ciudades Autónomas. El objetivo es unificar criterios en torno al estatus jurídico de Ceuta y Melilla analizando sus respectivos estatutos de Autonomía, aprobados en 1995, después de la polémica suscitada por la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) que declara nulo el nombramiento de una viceconsejera no electa. Según concretó ayer el portavoz del Ejecutivo ceutí, Jacob Hachuel, esta reunión se celebrará en Melilla, adonde viajarán el presidente de aquella Ciudad Autónoma, Juan Vivas, y la consejera de Presidencia, Mabel Deu. Ambos mantendrán una reunión con miembros del Ejecutivo melillense, encabezados por su presidente, Juan José Imbroda.
Con este encuentro, ambas Ciudades Autónomas buscan hacer “un frente común” después de que la última sentencia del TSJA haya reavivado el debate político respecto a la condición de Melilla y Ceuta como autonomías o municipios y sus competencias. Según ha decretado este órgano judicial en Ceuta, no puede haber miembros del Gobierno no electos, aunque el Ejecutivo de Juan Vivas insiste en que sí puede nombrar a consejeros o viceconsejeros que no sean diputados de la Asamblea, según un informe del Consejo de Estado.
En Melilla también se ha suscitado ese debate a raíz de la sentencia de Ceuta. De hecho, la semana pasada, Coalición por Melilla (CPM) advirtió a Imbroda de que podría caer en un delito de prevaricación si mantiene en su Gobierno cargos no electos y no toma las medidas oportunas para cambiar esa situación. Imbroda afirmó hace unos días que la sentencia de la ciudad caballa “no es de aplicación” en Melilla.
Resolver el “limbo jurídico” que sufren Melilla y Ceuta ha estado históricamente sobre la mesa de las reuniones bilaterales de ambos gobiernos autonómicos.
