El hecho de que ayer amaneciera con un cielo grisáceo no consiguió enturbiar el colorido festivo del gran día del deporte melillense. Es más, para los participantes, auténticos protagonistas del evento más promocional y mediático de cuantas actividades deportivas se desarrollan en la ciudad a lo largo del año, supuso un alivio porque si ya de por sí la prueba iba a exigirles un gran esfuerzo, con un “sol de justicia” la dureza de la competición hubiera aún sido mucho más fuerte. Espléndido ambiente
En pocas ocasiones Melilla ofrece una estampa tan festiva y alegre como la de ayer. Desde media mañana se pudo comprobar como cientos de personas se iban reuniendo en la Plaza de las Culturas y sus alrededores para, en unos casos, animar a sus familiares o amigos participantes, y en otros para contribuir con su presencia a la gran fiesta del deporte melillense. Y como nexo común en la mente de todos, la satisfacción por la excelente organización del Tercio Gran Capitán I de La Legión, aunque sin dejar tampoco de reconocer la labor de colaboración de Cuerpos y Fuerzas de Segundad del Estado, Sanidad, Turismo, Cruz Roja, fisioterapeutas o medios de comunicación entre otras muchas entidades, asociaciones y organismos colaboradores que con su contribución hicieron posible ofrecer una bellísima imagen de Melilla a través de algo tan solidario y unificador como es el vehículo universal del Deporte.
