La Ciudad Autónoma se unió ayer, un año más, a la iniciativa de la Hora del Planeta, organizada por World Wide Fund for Nature (WWF), apagando las luces del Palacio de la Asamblea. Esta acción forma parte de un constante plan de medidas con el fin de reducir el impacto medioambiental y ser un altavoz para la concienciación contra el cambio climático.