García Zafra, visiblemente emocionado, ha afirmado que se va “súper feliz” y “súper contento” porque “me voy a ir con esa tranquilidad” de que el colegio en el que ha estado más de tres décadas va a seguir marchando
La Ciudad Autónoma de Melilla ha realizado un solemne y emotivo homenaje al maestro y exdirector del colegio público ‘Juan Caro’, Alfonso García Zafra, que ha dedicado 50 años de su vida a la enseñanza, con la colocación de una placa con su nombre en la plaza de entrada al centro escolar. A juicio del presidente de Melilla, Juan José Imbroda, se trata de un homenaje “totalmente merecido” para una persona “que ha peleado mucho” por el colegio, al que “ha hecho grande”.
Por su parte, el exdirector del centro, visiblemente emocionado, ha agradecido el homenaje, que ha considerado “un honor muy grande” tanto por parte del Gobierno melillense y la Dirección Provincial de Educación, como por el profesorado y equipo directivo del centro.
Para García Zafra, lo más importante que señala la placa que preside la plaza con su nombre es que lleva la palabra maestro, una figura “importantísima en el mundo entero”.
“No está pagado”
“El trabajo que desarrollan los docentes no está pagado”, ha subrayado ante los medios, dejando claro que son los maestros “los que tenemos que cambiar los países”. “Tal y como va el mundo nos damos cuenta de que desde las primeras bases desde donde empiezan los niños, estos tienen que estar ya acompañados. Que sean independientes, libres. Que sean capaces de respetarse ellos mismos y quererse, porque es la única manera de tener paz y ser feliz”, ha resaltado.
Ha puesto el acento también en el respeto hacia la naturaleza, “que nos esta dando un montón de señales para que tengamos en cuenta que no lo estamos haciendo bien”, así como que procuren una sociedad “mucho más equitativa y justa donde pueda desarrollarse una convivencia en paz, y que tengamos los medios para luchar contra los grandes problemas que tenemos en el mundo”.
Ha destacado su origen humilde en la localidad norteafricana y ha dado las gracias a “todas aquellas personas que me he ido encontrando en el camino” durante este medio siglo de vida dedicado a la enseñanza.
“Esto no lo hace una persona sola. Hay que tener una idea, tenerlo muy claro, haber vivido un tiempo, despertar una vocación muy grande y tener la responsabilidad y cumplir la promesa que se ha hecho uno mismo en decir que, si yo he podido, estos pueden”, ha dicho.
Por último, García Zafra ha afirmado que se va “súper feliz” y “súper contento” porque “me voy a ir con esa tranquilidad” de que el colegio en el que ha ejercido 35 años como profesor y director va a seguir marchando.
