Este plan, que se extenderá durante tres meses, empezará con los árboles en mal estado ubicados en la calle General Villalba y en Donantes de Sangre
La Consejería de Medio Ambiente y Sostenibilidad anunció ayer que repondrá de manera inminente 154 árboles ubicados en diferentes zonas de Melilla que se encuentran en mal estado y que suponen “un serio riesgo de accidente” para los usuarios de la vía pública.
En rueda de prensa, el consejero Hassan Mohatar explicó que este problema fue objeto de un informe de su departamento en el año 2018 y se ha decidido actuar sobre los árboles en los que se ha detectado que no hay posibilidad de recuperación, después de que esta semana se produjera la caída de ramas de algunos de ellos en el Real.
Para evitar que haya situaciones de peligro para viandantes y vehículos, la Ciudad Autónoma va a empezar a actuar con un plan de apeos y sustitución sobre los árboles que se encuentran en peor estado, que serán sustituidos por otros ejemplares de la misma especie o parecidos.
Este plan, que se extenderá durante algo más de tres meses, hasta finales de enero, empezará con los árboles en mal estado ubicados en la calle General Villalba y en la Avenida Donantes de Sangre, aunque hay otros puntos también afectados por este problema, como el Parque Hernández, la Avenida Infantas de España, la calle Padre Oses, la Carretera Alfonso XIII y la calle Jiménez e Iglesias.
Árboles no protegidos
El consejero informó de que los ejemplares afectados pertenecen a las variedades Gleditsia triacanthos, o Acacia de Tres Espinas; Morus Alba, o Moreras y Melia azedarach, o Cinamomo, que no tienen una protección especial, lo que habría obligado a buscar una alternativa, ni tampoco tienen posibilidad de recuperación.
Según el informe de Medio Ambiente, son variedades que por su biología, presentan dificultades para vivir en entornos urbanos donde la poda del arbolado a veces es necesaria, y son variedades en desuso en la actualidad para su utilización en alineaciones dentro de la ciudad.
Algunos de estos ejemplares superan con creces los 50 años y están dañados muchas veces por golpes de vehículos, con numerosas pudriciones en fuste y resto de sistema estructural, circunstancias que comprometen su estabilidad con en peligro que esto implica.
La empresa adjudicataria del contrato de mantenimiento de parques y jardines será la encargada de llevar a cabo este plan para solucionar este problema, que Mohatar consideró “bastante importante” por la necesidad de evitar que daños a la ciudadanía que “tengamos que lamentar”.
Los trabajos que se van a llevar a cabo implican la tala, el destoconado y la apertura de nuevos alcorques, etc., además de la reposición marras sobre alcorque vacíos.
