La U.D. Melilla está próxima a cerrar la rescisión de contrato del entrenador Carlos Granero y es espera que en las próximas horas alcance un acuerdo con el nuevo técnico que dirija al equipo la próxima temporada. Sin embargo, para que el club melillense alcance un acuerdo con Granero le marcará una serie de exigencias, “principalmente de que no podrá entrenar a ningún otro club que no sea de la zona de Valencia, de donde es natural y reside actualmente”, según informó el presidente de la entidad azulina, Luis Manuel Rincón. El presidente de la U.D. Melilla explicó a este respecto que el club necesita que Carlos Granero cumpla una serie de requisitos mínimos para poder darle la carta de libertad. «Confío plenamente en su palabra y desde el primer momento me he creído que tiene un problema personal grave, pero también entiendo y veo lógico que esté buscando alternativas, ya que todo el mundo necesita trabajar, aunque hay una serie de puntos que hay que dejar bien atados en un documento, pues por encima de todo están los intereses de la U.D. Melilla».
Todo apunta como próximo destino del todavía entrenador del Melilla el Levante Atlético, aunque también baraja la opción de formar parte de la estructura deportiva del Valencia C.F.
«Estamos protegiéndonos en el sentido que se cumpla una serie de exigencias, pues si realmente tiene un problema familiar y debe dormir en casa, que eso se cumpla y no termine aceptando ofertas de la parte de Galicia, por poner un ejemplo», aseguró Luisma Rincón, quien añadió que Granero tiene que permanecer en su área de influencia. «Es lo que nos pidió y por tanto podría entrenar en su tierra. Yo no me puedo traer a un entrenador con un problema familiar, pues eso no tiene sentido».
Por tanto, significó que el tema del entrenador se debe resolver en dos o tres días, aunque no descarta que pueda solucionarse hoy mismo. «Lo que está pidiendo la U.D. Melilla no es nada del otro mundo. Solo estamos protegiendo a nuestro club, nada más. Que no pase como otras veces, que teníamos entrenadores con problemas y han cobrado toda la ficha. Lógicamente, desde el momento en que se le dé la carta de libertad, va a estar completamente rescindido y si tenía algo pendiente de cobrar no lo va a percibir».
