Ante la confirmación oficial de que GSI sustituirá a Serramar en el servicio de vigilancia del CETI, los trabajadores han decidido desconvocar la huelga que habían anunciado a partir del 30 de mayo, porque la nueva empresa “no es responsable” de que los vigilantes sigan sin cobrar el mes de abril. Mayte Molina espera que Serramar “no se vaya de rositas” y pague antes de que entre la mexicana GSI el 1 de junio. Mientras, seguirán concentrándose a las puertas del CETI cada día. "Estamos cumpliendo el calendario de movilizaciones que los trabajadores en asamblea decidieron", explicó Mayte Molina, que no es otro que concentrarse a las puertas del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) cada día, al menos hasta el próximo viernes, a las 10:30 horas, para reivindicar el dinero que les debe Serramar, que corresponde a la nómina de abril, a la que se podría sumar, muy probablemente la del mes de mayo, temen los vigilantes de seguridad, que desempeñan sus funciones no solo en el CETI, como recordó la secretaria de Acción Sindical de UGT. Sin embargo, en el resto de organismos, la empresa parece que sigue con el servicio. Del CETI, como ya se anunció, Serramar se irá. El delegado del Gobierno informó oficialmente el viernes en la reunión mantenida con los trabajadores de que será la empresa mexicana GSI la que sustituirá a Serramar a partir del 1 de junio, por lo que los vigilantes han decidido desconvocar la huelga que tenían prevista para el próximo 30 de mayo.
Molina explicó que han desconvocado las jornadas de paro porque la nueva empresa "no tiene ninguna responsabilidad" sobre lo que están padeciendo los vigilantes.
De la empresa mexicana, el sindicato dijo no tener referencias, esperando que la Administración sí que las tenga para haberse percatado de que no haya problemas y no se repita la misma situación que con Serramar, confiando en que la nueva empresa sea solvente económicamente
“Les va a costar”
Los trabajadores desconvocan la huelga, pero no las concentraciones, porque siguen sin cobrar y temen que Serramar "se vaya de rositas". Mayte Molina cree que "les va a costar bastante cobrar" lo que la empresa les debe. UGT pidió al director del CETI que no consienta que Serramar se vaya del centro sin pagar, teniendo los trabajadores que acudir a los tribunales, con lo que ello supondría, que el cobro de las nóminas se retrasara bastante en el tiempo. Son alrededor de cincuenta los trabajadores afectados y "aquí estaremos hasta que la empresa pague", declaró la secretaria de Acción Sindical de UGT en la concentración a las puertas del CETI, donde vuelven a protestar hoy.
