Como nunca llueve a gusto para todos, parece ser que también ocurre en los viajes que organiza la Viceconsejería del Mayor en la Ciudad Autónoma y cuya responsable es mi muy estimada Carnina San Martín.
Me cuentan que este aso se ha programado en primer lugar el viaje denominado de Ocio en lugar del correspondiente a Balneario con lo que, quienes siempre, por sus dolencias etc., utiliza el segundo de ellos se ven perjudicados al cogerle unas fechas –pleno invierno- impropias para los padecimientos que sufren casi todos ellos.
Me dicen un par de dichos usuarios de viajes a los balnearios que de la anomalía citada anteriormente, -el no dar prioridad a este desplazamiento en lugar del de ocio- se ha dado cuenta a la San Martín y que esta, hasta ahora, no ha dado ninguna respuesta. Lo lógico, dicen, es que para que la estancia en los balnearios no les coja en pleno invierno a quienes van a ellos, se hubiera programado antes que el viaje de ocio y no en pleno mes de diciembre y nada menos que en Sierra Nevada (Granada). Pues creo, sinceramente, que tienen razón, pero conociendo como creo conocer la forma humanitaria con todo el mundo de Carmina San Martín, algún motivo habrá para que el repetido viaje no se haya programado para, por ejemplo, septiembre u octubre y no en pleno invierno y nada menos que en la sierra granadina.
Aparte lo comentado, que espero y confío lo solucione la viceconsejera del Mayor porque experiencia tiene de sobra para ello, hay quienes también se quejan de que son numerosos los que realizan esos viajes con frecuencia y de forma repetida mientras otros que desean hacerlo no lo consiguen. Pues no sé qué habrá de cierto en ello, pero ahí queda dicha queja por si San Martín, que es la indicada para ello, quiere puntualizar lo que ocurre, según los que protestan por el motivo apuntado.
Lo que no ignoro, porque me lo han comentado familiares y amigos que han ido y siguen yendo de vez en cuando a esos viajes, que lo pasan a lo grande en todos los sentidos: organización, estancias, visitas, alimentación, fiestas, etc., etc., aunque también los haya que alegan que podrían programarse mejor. Lo que digo en un principio, nunca llueve a gusto de todos.
