El juez decano de Melilla, Fernando Germán Portillo, explica que los extranjeros que «cruzan ilegalmente» a la ciudad están solicitando asilo, por lo que los procedimientos para su expulsión o devolución se ven «interrumpidos o finalizados»
El juez decano de Melilla, Fernando Germán Portillo, afirma que los tribunales de la ciudad están registrando un «descenso importante» en el número de asuntos relacionados con Extranjería. En conversación con el MELILLA HOY, explica que las personas extranjeras que «cruzan ilegalmente» la ciudad, ya sea por vía terrestre o marítima, están solicitando asilo en Melilla, por lo que los procedimientos para su expulsión o devolución se ven «interrumpidos cuando no finalizados de forma definitiva».
Esto provoca que el volumen de asuntos relacionados con este ámbito en los Juzgados de lo Contencioso Administrativo sea menor que otros años. No obstante, aclara que dicho descenso no está vinculado a la reapertura de la frontera con Marruecos, sino que se trata de una «nueva dinámica de movimientos migratorios ilegales que recurren al asilo para tratar de eludir» las expulsiones o devoluciones.
«Si se paralizan esas expulsiones y devoluciones por la administración como consecuencia de la petición de asilo, también se paralizan los recursos que pueden dar a los tribunales esas expulsiones y devoluciones», explica Germán Portillo, quien señala que el tipo de inmigración que recibe Melilla es de carácter económico. «Se trata de personas que, muy legítimamente, tratan de mejorar de vida y quieren probar suerte en la Europa del primer mundo», añade, subrayando en ese sentido que esta clase de personas migrantes no son «sujetos de asilo», ya que no huyen de su país al estar perseguidos por sus ideas políticas, religiosas o de orientación sexual.
«No da el perfil», sostiene, afirmando que aun así realizan el procedimiento para solicitar asilo. «Y entre que se resuelva o no el asilo se paralizan esos procedimientos de devolución o expulsión», recuerda, afirmando que, al tratarse de inmigrantes económicos, «lo más probable es que se les deniegue el asilo«.
«Pero para entonces han pasado muchos meses y la expulsión o devolución de ese ciudadano extranjero ya será más difícil de materializar», agrega.
Incremento también en el número de asuntos que pasan por Juzgado de Guardia
Germán Portillo asegura por otro lado que los juzgados de la ciudad han vuelto a funcionar con la normalidad que había antes de la pandemia del covid-19. Por lo que se ha recuperado «el retraso acumulado» tras el parón que tuvieron que hacer los tribunales durante varias semanas en ámbitos como la Guardia o Violencia de Género, así como por el «reajuste» que tuvieron que llevar a cabo en la agenda de señalamientos.
«Eso ha quedado superado. Los retrasos han sido absorbidos por el funcionamiento y el esfuerzo realizado por todos los operarios de justicia y ahora la Justicia en Melilla está funcionando como antes de la pandemia», asegura el juez decano, quien apunta no obstante que se ha registrado un incremento en el número de asuntos que pasan por Juzgado de Guardia tras la reapertura fronteriza, aunque aclara que no se trata de un aumento «significativo» y no se ha vuelto a los números previos a la crisis sanitaria del covid-19.
