Los cien participantes distribuidos en 10 equipos disfrutaron con las tres pruebas planteadas por la Gran Movida 2016, que llevaban por título los siguientes nombres: ‘El único fruto del amor’, ‘Fábrica de peluches’ y ‘Los juegos del hambre’.
La Gran Movida 2016 sigue poniendo a prueba a sus participantes. Los jóvenes que integran los diez equipos participantes vivieron una ajetreada jornada de sábado, enfrentándose a los retos con la emoción de superarlos con buena nota y disfrutar en compañía de sus amigos.
La primera prueba de la mañana se celebró en un lugar idóneo para combatir las altas temperaturas. Los 100 participantes se dieron cita en la playa de los Cárabos, donde probaron de buena gana ‘El único fruto del amor’. Ese era el misterioso título que daba nombre al primer desafío. Efectivamente, se refería a la banana acuática
En esta ocasión, los equipos tenían que intentar resistir cuanto pudieran sobre la atracción acuática, ya que la clasificación dependía del tiempo que aguantaran antes de caer al agua. Una prueba nada fácil pero sumamente divertida. No obstante, mientras unos trataban de vencer a la gravedad para no dejarse caer al mar, otros se entretenían bailando ‘twerking’, ese movimiento que ha revolucionado las pistas de las discotecas y los ‘videoclips’ de los artistas.
La acción continuó por la tarde con un reto nuevo. Se avisó a los jóvenes de que fueran en busca de periódicos, telas, agujas, botones y sillas de playa. Este diario incluso recibió la visita de varios equipos, que llamaron a la puerta en busca de periódicos antiguos. “No tenemos ni idea de para qué quieren estas cosas”, decía uno de los miembros de ‘Los Corsarios’, quien aseguró que la Gran Movida había “empezado fuerte”.
La segunda prueba misteriosa, que tuvo durante una hora a los jóvenes corriendo de un lado hacia otro, consistía en realizar el mayor número de ositos de peluche con los materiales recabados. Un reto que, además, debía superar unos test de calidad, ya que los monitores tenían que dar “tres tirones en las costuras” de cada peluche para demostrar su resistencia. Mientras unos fabricaban peluches, otros demostraban ser un agente 007 pasando por una red láser. O al menos lo intentaban.
Los juegos del hambre
En la última prueba del sábado, cuatro miembros se convirtieron en tributos y otros cuatro en cazadores. El lugar, el Fuerte de Rostrogordo. “Los participantes deberán buscar por todo el fuerte las pistolas de agua, recargarlas y buscar a otros participantes para mancharlos. Cuando un participante es manchado, se le da por muerto y deja de jugar”, rezaba en las instrucciones.
El recuento
En el momento en el que se redactó esta pieza, las únicas puntuaciones que se hicieron públicas y a las que pudo tener acceso este medio fue a las de la gala inicial, en la noche del viernes, y a la de ‘El único fruto del amor’. Hasta ese momento, el equipo de ‘Los Mercenarios’ iba en cabeza, ocupando el primer puesto con 24 puntos. Le seguían las ‘Princesas vastas’, con cuatro puntos menos de diferencia y, en tercer lugar, el grupo ‘Hot Machine’, con 19 puntos en total.
