Como en otras ocasiones, en la explanada del Acuartelamiento "Millán Astray" de Melilla, tuvo lugar ayer la celebración del tradicional "Sábado Legionario" dedicado a todos los que dieron su vida por España y La Legión. La parada militar fue presidida por el comandante general de Melilla, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu y la formación estuvo al mando al mando del coronel jefe del Tercio, Melchor Marín Elvira.
Tras la entronización del "Cristo de la Buena Muerte", se procedió a la incorporación a filas de los Guiones del Tercio y la I Bandera, permaneciendo las unidades legionarias formadas hasta ser revistadas para comenzar el acto en el que se nombraron a los Caballeros Legionarios distinguidos. A continuación el coronel jefe pronunció una alocución legionaria a los asistentes que dio paso al acto homenaje a los que dieron su vida por España.
Después de la parada militar, y en el Fuerte de Cabrerizas Altas, se descubrió una placa conmemorativa de la concesión de la Laureada de San Fernando al general Juan Picasso González y se leyó la efeméride que dio lugar a tan preciada condecoración.
Como ya viene siendo una tradición arraigada la población de Melilla con su presencia y cariño confirmó la unión que tiene con su Comandancia General y con El Tercio Gran Capitán I de La Legión.
