Cafeterías y bares aprovecharon ayer toda la mañana para recuperar los depósitos y no quedarse como en la tarde del miércoles, dado que el descenso de la presión del agua, debido a la avería de la desaladora, dejó a quienes no tenían aljibe ni depósito con la cubertería, platos y cacharros hasta la mañana de ayer y quienes la tenían también, y es que al llegar la noche la mayoría ya se habían quedado sin agua. A todos les cogió por sorpresa, por lo que apenas tuvieron capacidad de reacción. Aún así, también se pudo ver la solidaridad de algunos como del que pudo disfrutar un bar situado en la Plaza de las Culturas. Si a los vecinos de algunos barrios el corte o en ocasiones la reducción de la presión del agua les cogió desprevenidos, a los comercios como bares, cafeterías, heladerías y todos aquellos que trabajan con el suministro de agua, les afectó al funcionamiento de sus negocios.
No tantos a aquellos que contaban con aljibe o depósitos de agua como la responsable de la cafetería Gurugú o gran parte de los establecimientos del centro, que aprovecharon hasta la última hora, hasta quedarse sin reservas. Esta situación también dio lugar a que tuvieran que cerrar los baños dado que la poca agua que podían mantener, la tuvieron que suministrar para los servicios mínimos.
Es por ello, por lo que tal y como contaba desde el restaurante Casa Marta tuvieron que dejar todo el ajuar hasta la mañana siguiente con el fin de poder dar los mínimos servicios.
Peor lo pasaban las heladerías y confiterías quienes tienen que preparar previamente los pasteles y helados pero no tenían la suficiente agua nada más que para servir cafés y poco más.
Así, lo contaba a este diario la responsable del California quien teme que las máquinas con las que hacen los helados que funcionan con agua se terminen estropeando, ya que no cuenta con aljibe y se vio obligada a apagarlas hasta la mañana de ayer. La responsable del establecimiento no comprende como dicha avería ha dado lugar a esta situación que le parece "tercermundista".
Solidaridad
Ante el corte de agua, algunos de los establecimientos como el Navona pudieron tirar para adelante gracias a la solidaridad de la gente. Con cubos de agua de otras viviendas donde contaba con agua pudieron estar durante toda la tarde y hasta la noche. Ayer por la mañana, se armaban de cubos de agua para poder seguir con el negocio hacia delante.
