El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº4, tras dos cambios de juez, continúa investigando las presuntas conductas ilícitas en materia de contratación por parte de diversas áreas de la Ciudad que se engloban en la 'Operación Ópera' y que posteriormente se dividió en tres piezas: Festejos, Eulen e Hijos Moreno S.A. (Himosa). Al respecto de esta última y tras el análisis de la documentación incautada en los registros realizados hace tres años, la Unidad Central Operativa (UCO) de Policía Judicial de la Guardia Civil ha detectado presuntas "conductas ilícitas" en materia de contratación en la que Himosa, junto con funcionarios de la Ciudad, habrían supuestamente preparado concursos públicos con una "concurrencia ficticia" con el fin de que Himosa fuera finalmente la adjudicataria. La Unidad Central Operativa (UCO) de Policía Judicial de la Guardia Civil, tras las pesquisas y el análisis realizado de la documentación que se incautó en el registro realizado en febrero de 2014 a la empresa Hijos de Moreno S.A. (Himosa), implica, en uno de los informes al que ha tenido acceso MELILLA HOY, a dos responsables de Himosa, tres miembros con responsabilidades de Gobierno, tres funcionarios de la Ciudad y hasta cinco empresarios de diversas empresas del sector.
Fuentes del TSJA no han podido confirmar que las personas que apuntan este informe estén investigadas, y señala que la juez del Juzgado de Primera Instrucción nº 4 está pendiente de tomarles declaración para aclarar su situación procesal dentro de esta pieza.
Aún así, este periódico ha intentado contactar con uno de los empresarios de Himosa pero tras varias llamadas telefónicas no ha obtenido respuesta, toda vez que el segundo empresario ha respondido a la llamada de MELILLA HOY pero ha rechazado aclarar la información investigada por la UCO.
Unos 12 contratos analizados
Los agentes de la UCO señalan unas 12 contrataciones realizadas relativas a la iluminación de diversos festejos que fueron adjudicados mediante un negociado sin publicidad, que según la legislación, se basa en que la Ciudad presenta los servicios a realizar al mayor número de empresas posibles para que presenten su oferta y se adjudique a la que cumpla con los criterios que marca los pliegos redactados previamente al inicio del proceso de adjudicación.
El negociado sin publicidad es un procedimiento de adjudicación en sí totalmente legal siempre que cumpla con todos los criterios y pasos que recogen la legislación. Sin embargo, la UCO ha detectado en el estudio de correos electrónicos y material informático diversos indicios que darían a pensar que supuestamente Himosa ya sabría que los servicios a prestar para la administración mediante este procedimiento, le iban a ser adjudicados. Incluso en algunos correos hay indicios de que presuntamente se habría implicado a terceras empresas para que el procedimiento tuviera apariencia de legalidad.
Así se puede ver en uno de los correos que envía uno de los trabajadores de Himosa a otro: "Si tienes hoy por la mañana preparado, para entregar, el "concurso-tapadera" que nos dieron ayer, avísame para entregarlo".
En otro de los correos que intercambian estos dos empresarios de Himosa se adjunta el presupuesto de una obra y uno le señala al otro que "debe aplicarle el formato" de otra empresa del sector -que no es Himosa- para "dirigirlo a la Ciudad". La respuesta a este correo, según recoge la UCO, es el presupuesto pero "cumplimentado con el logotipo, el sello y la firma digitalizada" de esta otra empresa.
Una "rebaja ínfima"
Los agentes han comprobado que un número importante de adjudicaciones entre 2010 y 2014 a la mercantil Himosa por el procedimiento mencionado se harían con una "rebaja ínfima sobre el precio máximo de licitación". La UCO señala que éste suceso "de manera indiciaría" podría dar lugar la existencia de "un concierto previo entre empresas para articular una concurrencia ficticia durante la licitación de los contratos".
Los agentes sospechan que las empresas concurrentes liciten "repetidas" veces por el precio máximo y es que es una conducta que "carece de lógica comercial y más bien reflejaría la intención de excluirse del proceso", especialmente, resaltan los agentes, cuando el precio era el "único" criterio de adjudicación. Incluso había ocasiones en que las empresas invitadas no presentaban oferta.
Documentación de otras empresas
La Guardia Civil apunta a que en el tráfico de correos y los equipos informáticos de la mercantil Himosa habían "formatos de ofertas y documentación necesaria para presentar en las licitaciones de algunas de las sociedades que fueron invitadas". Incluso, señalan los agentes, que poseían archivos de las ofertas económicas de las otras empresas que licitaban en los concursos con fechas anteriores a la fecha de presentación de las ofertas.
Los agentes señalan que dichos documentos apuntarían a que Himosa "bien conocía o confeccionaba las ofertas de los otros invitados". De esta forma, al ser el precio el criterio "podía asegurarse la adjudicación realizando una baja ínfima".
También los correos analizados por los agentes de la UCO apuntan a que "empleados de la sociedad Himosa habrían impartido instrucciones sobre cómo debían proceder terceros licitadores, para facilitar que la adjudicación del contrato recayese en Himosa". Todo ello, mediante instrucciones para que no ofertaran un precio con justificaciones "que en realidad habían sido ideadas por Himosa".
Papel de la Ciudad
Llama la atención de los agentes de la UCO como las empresas invitadas por la administración a las licitaciones en varias ocasiones "sean las mismas", pese a que la rebaja del precio de licitación era "inapreciable", o ni siquiera llegaban a presentar las ofertas.
Los agentes también han podido comprobar que en al menos una ocasión la Ciudad habría solicitado al personal de Himosa los datos de otras empresas que finalmente son invitadas, aunque Himosa termine siendo la adjudicataria. En este punto los agentes aclaran que piden información sobre las empresas pero no sobre ningún contrato que en ese momento se esté licitando.
Sin embargo, apuntan a que por la "proximidad temporal" y la "coincidencia de los licitadores" se hablaría de un contrato de alumbrado público en Donantes de Sangre. Aún así, afirman que sí han podido observar cómo desde la administración se informaría a Himosa de los contratos y las normas que regirían el concurso "antes de su publicación oficial".