Melilla ha sido escenario de un espectacular accidente que refleja que hay mucho por mejorar en la seguridad vial en nuestra ciudad. Un siniestro que se produce además con el conductor dando positivo en el test de alcoholemia que le practicó el equipo de la Policía Local que redactó el correspondiente atestado.
El suceso ha ocurrido la madrugada del jueves al viernes en la carretera del aeropuerto cuando un vehículo ocupado por cuatro personas perdió el control y uno de ellos resultó herido leve, según han informado a MELILLA HOY fuentes sanitarias.
Por su parte, fuentes policiales han detallado que el conductor justificó su volantazo, que provocó que el turismo diera una vuelta de campana hasta volcar, a la presencia de un animal que se le habría cruzado cuando descendía de la zona aeroportuaria.
En ese supuesto, quiso evitar el atropello de un animal que no nos han especificado y a raíz de ello acabó golpeando uno de los bordillos cuando iba a una velocidad de 70 kilómetros por hora.
Los Bomberos tuvieron que intervenir para situar el vehículo en su posición correcta mientras los ocupantes eran atendidos por el servicio de atención médica urgente del 061, si bien solo uno de ellos requirió atención por las contusiones que presentaba, apuntaron las citadas fuentes sanitarias. En el test de alcoholemia que se le practicó en ese momento al conductor por los agentes policiales, esto arrojó un resultado positivo.
Este accidente, en el que se mezclan cuestiones como el alcohol y la alta velocidad, son un fiel reflejo de que la seguridad vial sigue siendo en Melilla una asignatura pendiente para algunos.
