El terremoto en Marruecos de 2023 causó casi 3000 muertos y daños en miles de viviendas e infraestructuras. A un año, la reconstrucción avanza lentamente, dejando a muchos afectados sin ayuda.
El pasado 8 de septiembre se cumplió un año del terremoto de Marruecos que dejó casi 3000 muertos
55.000 viviendas resultaron dañadas por el terremoto, así como 1.050 escuelas, 42 centros de salud cercanos, 2.516 mezquitas y otros sitios de culto, y 299 santuarios y mausoleos.
El primer aniversario del devastador terremoto que golpeó varias provincias montañosas del centro de Marruecos, causando casi 3.000 muertos, más de 5.000 heridos y decenas de miles de personas sin hogar, se cumplió el pasado domingo.
La nación magrebí experimentó la mayor tragedia de su historia reciente.
¿De qué forma sucedió?
En la región montañosa del Alto Atlas, el sábado 8 de septiembre de 2023 a las 23:11 hora local, un temblor de magnitud 6,8 se registró, a una profundidad de ocho kilómetros, con epicentro en la localidad de Ighil, ubicada unos 80 kilómetros al suroeste de Marrakech.
Con epicentro en las provincias sureñas de Marrakech, Al Haouz, Chichaoua, Taroudant, Ouarzazate y Azilal, el sismo, sentido entonces en Rabat y Casablanca y en menor medida en Portugal y el sur de España, abarcó un territorio de aproximadamente 79.000 kilómetros cuadrados. Estas zonas eran identificadas en anteriores mapas como de actividad sísmica moderada. Asimismo, estas provincias albergan una gran cantidad de diminutos poblados con viviendas típicas edificadas en adobe y montañas que superan los 4.000 metros de altura.
Daños materiales y víctimas
Un total de 2.960 personas fallecieron debido a la tragedia, siendo la provincia de Al Haouz la que soportó la mayor cantidad de víctimas mortales por estar más cercana al epicentro. Además, otras 5.674 personas resultaron heridas, de acuerdo a la información oficial proporcionada.
Daños causados por el sismo: 55.000 residencias, 1.050 instituciones educativas, 42 unidades de salud, 2.516 templos, 299 lugares sagrados y monumentos históricos como los palacios de Badia y Bahia en Marrakech, con daños leves, y la mezquita de Tinmel, del siglo XII y Patrimonio Mundial, que sufrió graves destrozos al estar cerca del epicentro del temblor.
Según estimaciones, el sismo en el Atlas provocó una reducción de 0,24 % del PIB de Marruecos en 2023.
Intervenciones de la administración marroquí
Después trágico evento, a las labores de reconstrucción se les otorgó un presupuesto provisional de 120.000 millones de dírhams (11.000 millones de euros) por parte del Gobierno marroquí en un plan de cinco años, el cual deberá favorecer a 4,2 millones de residentes perjudicados.
Una ayuda mensual de 2.500 dirhams (230 euros) durante un año fue destinada por el Gobierno para los damnificados, y una asistencia que varía entre 140.000 dirhams (12.900 euros) y 80.000 dirhams (7.360 euros) fue otorgada a personas cuyas casas colapsaron por completo o sufrieron daños parciales.
Marruecos permitió la participación, en las labores de rescate, a equipos de Emiratos Árabes, Catar, Reino Unido y España. Más de un centenar de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) fueron desplazados por España.
Reedificación muy lenta
Transcurrido un año, se han reparado o renovado un total de 1.000 hogares en las provincias golpeadas, de un conjunto de 55.000 residencias afectadas por el sismo. Los representantes regionales estiman que la labor de reconstrucción completa no concluirá antes de 16 o 19 meses.
De acuerdo con las autoridades de Marruecos, 57.805 hogares han obtenido por lo menos el primer desembolso de 20.000 dirhams (1.800 euros) para la restauración de sus viviendas. Adicionalmente, 63.862 familias han recibido durante once meses (de un total de doce) la subvención directa mensual de 230 euros para cubrir sus necesidades básicas.
Además, 353.830 sacos de cebada y 28.000 reses fueron entregados a los campesinos y ganaderos afectados, mientras que se renovaron 111 escuelas y 42 clínicas.
Queda mucho por hacer
Un vecino damnificado del barrio judío de Marrakech se queja de que: “Hay personas que continúan viviendo en casas parcialmente destruidas, a pesar de estar en riesgo de derrumbe. No tienen otro lugar donde vivir. En el barrio, hay entre 120 y 130 casas afectadas, pero solo se han reconstruido entre 10 y 12. No he recibido ayuda para la restauración y ahora vivo en la habitación de mi hermano.”
Muchos otros vecinos de Marrakech se quejan por no haber recibido todavía la ayuda de 230 euros.
En la aldea de Tafagajt murieron ochenta de sus 400 vecinos el 8 de septiembre de 2023. Ahora quedan solo un centenar, que han comenzado a reconstruir sus casas lidiando con el viento, el calor y la lluvia desde sus precarias tiendas de campaña.
Los pocos que están cobrando la ayuda no saben cómo se las arreglarán cuando pase el año y dejen de cobrarla. Muchos tienen que mendigar en las calles o sacan unos pocos dirhams aparcando coches.
En resumen: El turismo se va recuperando, pero falta mucho por hacer para ayudar a los damnificados. Las ayudas son lentas o, en muchos casos, no llegan, con la consiguiente desesperación de los afectados.