El decano volvió ayer, 24 de agosto, a la actividad, tras casi cuatro meses de parón, en concreto desde que cayera eliminado ante Ourense en el segundo partido del play off de cuartos de final. En este primer día de pretemporada, los jugadores fueron sometidos a diferentes pruebas médicas y, posteriormente, realizaron los primeros trabajos físicos. Por la tarde, se ejercitaron a las órdenes de Alcoba. Tras la reunión de presentación del pasado domingo, ayer era el día de inicio oficial de la pretemporada para el Melilla Baloncesto. Así, a las 10’00 horas arrancaba la primera de las dos sesiones previstas para el lunes.
Cabe reseñar que antes de que echara a andar este primer entrenamiento, la plantilla acudió a los Laboratorios Lamas para realizarse un control sanguíneo junto al médico del club, el doctor Luis Segura. Posteriormente, los jugadores fueron sometidos a un estudio antropométrico a cargo del fisioterapeuta de la entidad, Alejandro Ríos.
Una vez finalizadas estas pruebas, el equipo comenzó el trabajo con la presencia de los jugadores del primer equipo, casos de Eloy Almazán, Pablo Almazán, Pelayo Larraona, Edu Gatell, Edu Hernández-Sonseca, Héctor Manzano, Josep Franch, Marcos Suka y Asier Zengotitabengoa, más los jugadores vinculados Álvaro García, Joaquín Carrasco, Raúl Úbeda y Jorge Rodríguez. Brandon Edwards fue el único ausente, al contar con permiso del Club para incorporarse más tarde, con el objeto de que solucione unos problemas burocráticos.
Esta primera sesión de entrenamiento se dividió en dos partes. La primera de ellas se desarrolló en el gimnasio de la instalación autonómica, en la que los jugadores realizaron un trabajo inicial de CORE, concluyendo con un circuito con diferentes estaciones para intentar trabajar la totalidad de los grupos musculares.
Después de una hora entre hierros y pesas, fue el turno de bajar a la cancha de juego y proseguir con el trabajo físico. El preparador del decano, Miguel Martínez Duarte, diseñó varios ejercicios de gran carga aeróbica y de resistencia, pero siempre con el balón como protagonista. La plantilla cerró la jornada matinal con una serie de estiramientos.
Por la tarde, desde las 19’00 horas, el plantel regresó para completar el doble turno definido para este primer día de pretemporada. Esta sesión vespertina fue dirigida en su totalidad por el técnico Alejandro Alcoba, y en la que comenzó a trazarse las primeras líneas de lo que debe ser esta temporada el juego del conjunto de la ciudad autónoma.
Mercado de fichajes
Dos jugadores habían sonado para formar parte de la plantilla del Melilla Baloncesto, aunque finalmente no lo hicieron. Se trata de Álex Llorca y Lluís Costa, este último parecía uno de los candidatos a suplir la repentina marcha de Albert Sàbat, aunque finalmente la entidad que preside Jaime Auday se decantó por Josep Franch.
Álex Llorca, de 26 años de edad y uno de los referentes para el Cafés Candelas Breogán de la temporada pasada, seguirá vistiendo de celeste en la ciudad amurallada. La noticia de su renovación fue recibida con mucho agrado entre los aficionados lucenses, ya que en la última campaña fue uno de los jugadores que más conectó con el Pazo.
En cuanto al Peñas Huesca, ya tiene cubierto el puesto de base para el próximo curso con el fichaje de Lluís Costa, que volverá al equipo peñista después de lograr el ascenso con el Ford Burgos. A sus 22 años, el catalán es toda una joya del baloncesto FEB.
