La Dirección General de Tráfico (DGT) lleva a cabo desde ayer y hasta el próximo domingo 7 una campaña especial de control y vigilancia del consumo de alcohol y droga entre los conductores. En Melilla, como ya es habitual, será desarrollada por la Policía Local, que tiene las competencias de tráfico. Este tipo de campañas son habituales en estas fechas.
Las pruebas de alcoholemia se llevarán a cabo por todas las zonas de Melilla y a cualquier hora del día, especialmente de noche y al mediodía, para que los controles resulten también disuasorios, informaron fuentes policiales.
Según informó ayer la Jefatura de Tráfico en una nota de prensa, el objetivo de esta campaña es seguir haciendo hincapié en la importancia de concienciar a todos los conductores que el binomio alcohol y conducción es incompatible, ya que está demostrada la relación entre consumo de alcohol, incluso a bajas concentraciones etílicas y la reducción de la capacidad de conducción.
Cuatro de cada diez conductores fallecidos el año pasado en accidente de tráfico presentaron resultados positivos en sangre a drogas y/o alcohol y/o psicofármacos, según consta en la memoria sobre víctimas mortales en accidentes de tráfico 2014, elaborado por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses.