Los tres grupos de la oposición de la Asamblea de Melilla se levantaron ayer de la Junta de Portavoces que habían solicitado formalmente el viernes para pedir explicaciones al Gobierno local sobre la Operación Ópera después de que el pasado miércoles la Guardia Civil registrara varias dependencias municipales. Los portavoces de los tres grupos parlamentarios mostraron su malestar por el hecho de que no asistiera el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, y en su lugar lo hiciera la vicepresidenta primera de la Asamblea, Cristina Rivas, que argumentó que tiene las competencias delegadas del presidente. Los representantes de Coalición por Melilla (CPM), PSOE y Populares en Libertad (PPL) coincidieron en declaraciones a los periodistas al considerar la ausencia de Imbroda como una falta de respeto hacia la oposición y a los ciudadanos melillenses, y avanzaron que piensan seguir pidiendo responsabilidades políticas por este asunto.
El líder de la oposición y presidente de CPM, Mustafa Aberchán, reprochó a Imbroda y a su Gobierno que “están en la dinámica de ofender cada día más al Pueblo de Melilla con gestos que no son propios del que tiene que representar al máximo responsable de la institución”, que es quien decide la estructura política y técnica del Ejecutivo.
“Es él [Imbroda] y sólo él quien tiene que marcar los tiempos o las decisiones de renovar, cambiar o no cambiar y es el que tiene que explicarse”, insistió Aberchán, que no descartó plantear alguna propuesta en el Congreso de los Diputados en este sentido.
El portavoz socialista, Gregorio Escobar, manifestó por su parte que su grupo no está dispuesto a participar en lo que considera que “va a ser un simple paripé para no decir nada a los ciudadanos, que son los que en este momento exigen y necesitan explicaciones del máximo responsable, que es Imbroda”.
Además, recordó que solo Imbroda es quien puede responder a las medidas concretas que el PSOE ha planteado en la Asamblea, como la celebración de un pleno extraordinario para dar explicaciones en materia de contratación y crear una comisión de evaluación de todos los contratos de la ciudad, además de “terminar con la contratación a dedo”.
“Lo que esté en juego es saber cómo se gasta el dinero que sale del bolsillo de los melillenses e Imbroda tiene un pánico absoluto a dar ninguna explicación sobre eso”, denunció Escobar, que avanzó que el PSOE va a esperar a que se levante el secreto de sumario para estudiar si se presenta como causa de este proceso.
El portavoz de PPL, Julio Liarte, criticó que haya quienes pretenden extender la idea de que “esto no tiene mucha importancia” a pesar de que “es un asunto de extrema gravedad” porque “nunca se han producido tres registros consecutivos y también en domicilios particulares”, lo cual “afecta a una forma de gobernar de Imbroda”.
Asimismo, dijo que en el caso de que “Imbroda pretenda que todo siga igual”, PPL enviará una carta al presidente del PP y del Gobierno, Mariano Rajoy, para pedirle que disuelva la Asamblea y se constituya una gestora integrada mayoritariamente por miembros del PP.
La versión del Gobierno
También se pronunció el portavoz adjunto del PP y vicepresidente primero de la Ciudad Autónoma, Miguel Marín, que acusó a los miembros de la oposición de mantener una “actitud anárquica” que ya llevó a cabo el viernes al no asistir al Pleno de la Asamblea, aun cuando son estos grupos los que han pedido la Junta de Portavoces.
Marín dijo que los miembros de la oposición que acudieron ayer a la Junta de Portavoces “son las menos autorizadas para dar lecciones de ética ni de moral”, dado que los representantes de CPM y PSOE están procesados por el caso del voto por correo y el de PPL tiene un presidente inhabilitado y condenado.
Por todo ello, lamentó la “actitud totalmente antidemocrática” de la oposición, a la que acusó de “montar un circo mediático de un asunto que está bajo secreto de sumario” y del que el Gobierno no tiene más información de la que ha aportado a los tres grupos facilitándoles el auto del Juzgado de Instrucción número 4 de Melilla.
Para terminar, Miguel Marín dijo que el Ejecutivo local no piensa perder “ni un solo minuto con estos señores que no saben hacer ni siquiera oposición”, sino que se dedicará a “trabajar y defender los intereses de los melillenses”, que es lo que les ocupa y preocupa.