La Guardia Civil ha intervenido 104,30 kg de polen de hachís escondidos en dobles fondos habilitados en el suelo y el techo de un vehículo que pretendía embarcar en uno de los buques que conectan Melilla con Almería, y ha detenido a sus dos ocupantes. En una nota de prensa, la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla ha informado de que la droga fue localizada durante el registro previo al embarque en el puerto de la ciudad en la madrugada del día 14.
Un vehículo Mercedes GLK 220 CDI, con placas de matrícula española y ocupado por una pareja, llamó la atención del agente actuante, que realizó sobre el vehículo un control más exhaustivo.
El conductor y el acompañante mostraron en todo momento una aparente normalidad y, una vez que les fue requerida la documentación del conductor y la del vehículo, se les invitó a que bajaran del turismo y respondieron a la pregunta del agente que no tenían nada que declarar.
El guía canino del Servicio Cinológico, ayudado por el can detector de drogas, realizó una inspección sobre el vehículo y mostró claros indicios de que en el interior, y concretamente en los laterales de los asientos del vehículo, podría llevar algún tipo de sustancia estupefaciente.
En el techo
Una segunda inspección más exhaustiva realizada por el Equipo de Registro de la Sección Fiscal de Muelle permitió detectar una anomalía en la zona del techo del vehículo, donde había un habitáculo manipulado y preparado al efecto, en cuyo interior había distintos paquetes de varias formas que por su olor, color y textura resultaron ser hachís.
En total, los agentes intervinieron 64 paquetes que pesaban 104,30 kg de una sustancia de color marrón verdosa que, presumiblemente, por sus características se trataba de polen de hachís, que contiene la más alta concentración del principio activo de este tipo de estupefaciente.
El instituto armado procedió a detener a los dos ocupantes del vehículo, dos varones de 27 y 26 años, el conductor de nacionalidad española y su acompañante con permiso de residencia en la ciudad.
Han sido puestos a disposición judicial como supuestos autores de un delito contra la salud pública, en su modalidad de tráfico de drogas, junto a la droga intervenida y el vehículo utilizado en la comisión del ilícito penal.
Con esta actuación, la Guardia Civil evita la distribución y comercialización en el mercado ilícito de unas 422.000 dosis de este tipo de estupefaciente.
