La Guardia Civil interceptó ayer a 70 inmigrantes de origen magrebí, 61 de ellos menores de edad, que se encontraban en las inmediaciones del puerto de Melilla o incluso en el interior de sus zonas de seguridad para intentar acceder a los buques y llegar como polizones a la península. Esta cifra es una de las más elevadas en las actuaciones de este tipo que suele llevar a cabo desde hace varios meses, y que en lo que va de año acumula 1.306 inmigrantes interceptados en la zona restringida del puerto, de ellos 463 menores de edad. La actuación de ayer empezó muy temprano, como siempre, para pillar desprevenidos a los inmigrantes. A las 8 de la mañana ya había entre 20 y 25 agentes de la Guardia Civil rastreando la zona por tierra y mar, pero también por aire de manera momentánea, ya que el helicóptero de la Guardia Civil pasó circunstancialmente por allí durante un breve espacio de tiempo, aunque no formaba parte de la orden de servicio.
Esta intervención se enmarca en un operativo permanente en la zona que tiene como objetivo evitar que los asentamientos de estos inmigrantes, que suelen ser de nacionalidad marroquí o argelina, se convierta en permanente.
De los 61 menores interceptados en las primeras dos horas y media de operativo, 20 se encontraban en las zonas de acceso restringido del puerto, ocultos en bateas, camiones y otro tipo de vehículos dispuestos allí para el embarque. Por eso la actuación de la Guardia Civil tenga como finalidad “velar por la seguridad de estas personas, ya que en cualquier momento se puede producir un accidente de cualquier tipo”.
Respecto a los 9 adultos, uno fue detenido porque estaba en busca y captura como presunto autor de un delito de lesiones, aunque la Guardia Civil está comprobando si, como sospecha, también lo es de otro delito de robo.
Los menores fueron entregados a la Policía Local para su puesta a disposición de la Consejería de Bienestar Social y Sanidad de la Ciudad Autónoma, mientras que a los adultos se les aplicó la Ley de Extranjería y fueron trasladados a la Jefatura Superior de Policía, excepto el detenido, que fue puesto a disposición judicial.
La veintena de agentes que participaron ayer, entre los que había también algunos de paisano, forman parte de diferentes unidades, entre ellas el Servicio Cinológico, que aportó dos canes especializados en la búsqueda y localización de personas, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) y varias patrullas de Seguridad Ciudadana.
