El pasado viernes saltó la noticia de que el exjefe superior de Policía de Melilla, Juan Manuel Calleja, había sido relevado como número dos del Cuerpo en Madrid por “comportamientos ajenos a su trabajo” tras reunirse con el supuesto cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, sin que al parecer lo supieran el jefe superior de Policía de Madrid ni el Ministerio del Interior, aunque sí a un mando de la Dirección Adjunta Operativa (DAO). Esta versión, ofrecida por ‘eldiario.es’ citando fuentes policiales, contrasta con la que ayer dio el diario El Mundo, según el cual la verdadera razón del cese de Calleja es una disputa con el Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
Según el rotativo nacional, numerosas fuentes desmienten que el motivo fuera la reunión con Correa. “La verdadera razón fue, según estas fuentes, una disputa con el servicio de espionaje español, el CNI, por el control de un confidente. Este informador, según las mismas fuentes, reportaba tanto a Calleja como a un alto cargo del servicio de inteligencia. Desde el CNI pidieron a Calleja que dejara a ese confidente, pero él se negó y esa desobediencia le ha costado el puesto”, informó ayer El Mundo.
Ese diario también apuntaba a que otras razones podrían haber influido en la decisión, como la reunión de Calleja con Correa, de la que según El Mundo sí estaban informados el jefe superior de Policía de Madrid y el director adjunto operativo, Eugenio Pino, que es el máximo mando policial en España.
