No obstante, su presidente, Farid Abdel-lah, ha señalado que “cada uno es libre de hacer lo que quiera”, dejando claro que todo aquel creyente musulmán que no pueda permitirse económicamente adquirir un borrego “no está obligado” a realizar el sacrificio por la Pascua Grande
El pasado mes de febrero, el Rey de Marruecos, Mohamed VI, pidió a sus ciudadanos que no sacrifiquen este año borregos por la Pascua Grande musulmana, el Aid el Kebir, por falta de ganado, una fiesta que este año está prevista para el 6 de junio. La decisión del monarca responde a una preocupación tanto económica como climática.
En el caso de Melilla, no parece que exista dicha preocupación ya que, según ha señalado la Comisión Islámica (CIM), en la ciudad autónoma “no tenemos el problema” que existe en el país vecino. No obstante, su presidente, Farid Abdel-lah, ha indicado ante los periodistas que “cada uno es libre de hacer lo que quiera”.
“Una subida muy grande” en el precio
Ha reconocido que en los últimos años ha habido “una subida muy grande” en el precio para adquirir un borrego para sacrificarlo por la Pascua Grande.
Asimismo, ha recalcado que “en nuestra religión, todo aquel que no esté bien económicamente, no está obligado” a realizar el sacrificio por dicha fiesta. “Lo que pasa es que, por tradición, si la gente tiene que endeudarse para darle esa alegría a sus familias e hijos, lo hace. Ahora mismo, y tal y como está el precio, hay mucha gente que está a favor de esta idea de que este año no se va a comprar, pero, en un principio, cada uno es libre de hacer lo que él quiera”, ha insistido al final.
La fiesta de Aid El Kebir conmemora el avasallamiento de Ibrahim (Abraham) a Dios que le ordenó sacrificar a su hijo Ismaël. Ibrahim que no vacila en sacrificar a su hijo Ismaël para mostrarle su sumisión a Dios, es para los musulmanes el modelo del creyente.
Esta fiesta llamada también la » Fiesta del Sacrificio » o fiesta del cordero marca el fin de la peregrinación (Al Hajj), se efectúa cada año el 10 del mes de Dhou Al Hijja que es el último mes del calendario musulmán.
