La propuesta, dotada con una subvención de 290.000 euros, la pondrá en marcha la Conferencia Virgen de la Luz. -Las tarjetas son de 250 y 150 euros y se distribuirán en función de si son familias numerosas o de dos o tres hijos
La Ciudad Autónoma ha vuelto a poner en marcha el programa para la distribución de tarjetas-monedero a familias que, a causa de la crisis sanitaria derivada de la pandemia del covid-19, se encuentran en situación de pobreza o en riesgo de exclusión social. Este programa, que está dotado con una subvención de 290.000 euros, lo ejecutará la Conferencia Virgen de la Luz, que repartirá este año un total de 850 tarjetas a este tipo de familias. Una cifra que dobla a la del año pasado, cuando repartieron 450 tarjetas de 300 y 200 euros.
«Lo que queremos es ampliar un poco para que, todo aquel que esté necesitado, le llegue y que pueda volver a repetir», ha justificado la presidenta de la entidad, Mari Carmen Chaparro, quien ha explicado que las tarjetas de este año son de 250 y 150 euros y se distribuirán en función de si son familia numerosa o de dos o tres hijos. Actualmente, calculan que ya han repartido unas 460 tarjetas.
Requisitos
Para poder obtener la tarjeta-monedero, las personas interesadas deben presentar, aparte del informe social y verificar que «verdaderamente están necesitados», los siguientes requisitos: El DNI de todos los miembros de la familia, certificado de padrón colectivo, el libro de familia, la última nómina de los miembros para comprobar si se encuentran en una situación «precaria», el informe del IMSERSO por si tienen «alguna paga» o pensión de dicha entidad, el último recibo del alquiler y el informe de bienes de todas las personas o o de la persona que esté en la vivienda. «No es fácil llegar a una tarjeta de estas», ha asegurado la presidenta de la Conferencia, quien advierte de que si no se presenta toda la documentación no pueden entregar la tarjeta.
Para poder solicitarlas deben acudir a la oficina del Banco de Alimentos ubicado en el Tiro Nacional. «Ellos se percatan de la situación de las familias y se acercan cada vez más. Lo que pasa es que muchas de ellas no reúnen los requisitos para poder solicitar la tarjeta», ha apuntado. Estas tarjetas, que las gestiona y elabora ‘La Caixa’, funcionan en grandes superficies como Mercadona o Carrefour, tiendas pequeñas de barrio, farmacias y ópticas.
A preguntas de los periodistas, Chaparro explica que las personas o familias que recojan la tarjeta deben firman un recibí en el cual consta que la Conferencia Virgen de la luz les ha entregado dicha tarjeta. Una vez que hayan agotado la cantidad económica con la que viene dotada dicha tarjeta, tienen que devolverles la tarjeta y los tickets de compra para comprobar en qué productos han gastado el dinero. En este aspecto, ha enfatizado que no se permite la adquisición de bebidas alcohólicas ni comida ‘gourmet’ con dichas tarjetas. «Por lo demás, todo se puede comprar», afirma.
«Lo de la fiscalización es muy importante porque la parte que corresponde a la Consejería y a la Administración es fiscalizar esos requisitos si se cumplen por cada unidad familiar», ha añadido el viceconsejero de Juventud y Participación Ciudadana, Abderrahim Mohamed Hammú, quien ha anunciado que ya está en trámite otra partida de 200.000 euros para cubrir los gastos de gas, luz y butano. Asimismo, ha resaltado que la puesta en marcha de este programa de tarjetas-monedero ha creado cinco puestos de trabajo para cinco familias vulnerables: una coordinadora, un auxiliar administrativo, una limpiadora y dos monitores asistenciales para cubrir «toda esta demanda».
«Todo lo que se haga en este sentido es poco», ha afirmado el cepemista.
Chaparro, por su parte, ha agradecido al viceconsejero su trabajo y predisposición a la hora de poner en marcha el programa.
