La Casa de Castilla y León en Melilla celebró ayer una comida de hermandad con una treintena de socios para conmemorar la festividad de las Águedas, una fiesta muy popular en su región. La comida tuvo lugar en el Restaurante Miguel Benítez, donde algunos de los asistentes acudieron ataviados con los trajes regionales de aquella comunidad. La festividad de la Águedas en Castilla y León reviste una notable relevancia, ya que es el día de las mujeres, que toman el mando en las localidades donde se celebra. Su origen se remonta al año 1227 y tiene su mayor exponente en la localidad segoviana de Zamarramala. La historia dice que las mujeres del lugar intervinieron decisivamente en la reconquista del Alcázar de Segovia, entreteniendo a las tropas sarracenas que defendían la fortaleza, mientras las castellanas atacaban el alcázar. La victoria fue atribuida a la ayuda de Santa Águeda, y por ello se celebra el acontecimiento coincidiendo con la festividad de la santa, el 5 de febrero.