El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha avanzado hoy que su departamento y el Ministerio de Justicia van a estudiar conjuntamente cómo "poner coto" a ciertas expresiones que incitan al odio o hacen apología del delito en las redes sociales (RRSS), desde el respeto a la libertad de expresión. Fernández Díaz se refería así al debate abierto tras los comentarios insultantes publicados en los últimos días en las redes sociales a raíz del asesinato de la Diputación de León, Isabel Carrasco, y ha avanzado que estudiarán instrumentos legales "adicionales" para perseguir esos delitos. Fernández Díaz ha considerado que ese tipo de conductas que incitan al odio y a la comisión del delito "son susceptibles de ser consideradas como tales" y deben ser perseguidas, por lo que no descarta reforzar la ley para ello si es necesario. "Si los instrumentos legales actuales no son suficientes, vamos a estudiar la manera de abordar instrumentos legales adicionales que permitan hacer compatible la libertad de expresión y el derecho a la información con el derecho a los ciudadanos a la intimidad, el honor y a su seguridad", ha recalcado.
Anonimato.- El titular de Interior ha dejado claro que quien delimita los límites de lo que es delito son las autoridades judiciales, pero sí considera que debe abrirse una reflexión frente a actitudes que, a su juicio, deben tener un "reproche penal" o administrativo, al igual que lo tienen la incitación al odio, la violencia o xenofobia en el deporte. En este sentido, ha hecho hincapié en que el ciberdelito y la cibercriminalidad es uno de los mayores retos y amenazas a los que hay que hacer frente y tienen también esa proyección, en la que "bajo el antifaz" o el disfraz del anonimato que dan las redes sociales, se hacen comentarios peligrosos que incitan al odio y a la comisión de delitos y pueden traer después "consecuencias drásticas para todos".