La familia del fútbol melillense, representada por el Grupo Amigos Futboleros de Melilla, rindió este miércoles un emotivo homenaje a Juan Moya, tanto por su labor de ex guardameta y entrenador como por su contribución a la formación de técnicos locales. Durante el acto, numerosos amigos y compañeros de distintas etapas, en torneo al medio centenar de asistentes en el homenaje, compartieron unas palabras de cariño y reconocimiento hacia el homenajeado.
Manolo Agulló, presidente del Grupo de Futboleros y amigo de toda la vida de Moya, fue el primero en tomar la palabra y recordó con emoción sus vivencias compartidas desde la infancia. “Hablar de Juan Moya es hacerlo de toda una vida. Nos conocemos desde niños y hemos compartido familia, fútbol y amistad. Su trayectoria es larga y ejemplar, primero como jugador, luego como entrenador y formador. Pero, por encima de todo, Juan ha sido siempre una buena persona, con una gran voluntad y una amistad sincera con todos. Eso, en el fútbol y en la vida, es lo más importante”.
A continuación, intervino Paco Benítez, ex presidente de la U.D. Melilla y del extinto Industrial Melilla, quien destacó la importancia de este tipo de encuentros y el significado que tienen para el fútbol local. “Llevamos más de diez años celebrando estas reuniones entre veteranos del fútbol melillense, y este homenaje a Juan es un ejemplo de lo que representa este grupo: amistad, compañerismo y pasión por el deporte. Juan ha sido un gran profesional, un hombre comprometido con su club y con su ciudad. Este reconocimiento es también una muestra de lo que es el fútbol en Melilla: auténtico y unido”.
Por su parte, Miguel Marín, vicepresidente de la Ciudad Autónoma, intervino en el homenaje en representación del Gobierno Local. “Es un honor participar en un homenaje tan merecido como este. Juan Moya es historia viva del fútbol melillense, un gran entrenador, un formador incansable y, sobre todo, una persona ejemplar. Hoy reconocemos no solo su trayectoria deportiva, sino también los valores que ha transmitido: esfuerzo, humildad, compromiso y amor por Melilla”.
“Gracias a su trabajo, muchos futbolistas locales pudieron crecer y triunfar. Por todo ello, la ciudad le rinde hoy un merecido reconocimiento”, resaltó el representante del Gobierno Local.
Finalmente, visiblemente emocionado, Juan Moya agradeció las muestras de afecto recibidas de sus amigos y compañeros. “Solo puedo dar las gracias a todos los que han estado a mi lado durante tantos años. Este homenaje me emociona profundamente. El fútbol ha sido mi vida y he tenido la suerte de compartirla con grandes personas. Me siento muy orgulloso de haber formado parte de esta familia y de haber contribuido, en la medida de lo posible, a que el fútbol melillense siga creciendo”.
El acto concluyó con la entrega de varias distinciones y recuerdos al homenajeado por parte del grupo organizador, del Gobierno Local, de la Federación Melillense de Fútbol y de un grupo de ex jugadores de categoría Juvenil que dirigió en el Gimnasio Iglesias.
