El ala-pívot nacido en Algeciras se ha convertido en uno de los jugadores más regulares en lo que llevamos de temporada, habiéndose perdido un solo partido de liga, con un promedio de 9.5 puntos y casi 6 rebotes para un total de 10 créditos de valoración (12.8 en los play off).
Jeffrey Godspower, pese a no saltar de inicio el pasado domingo ante el Bàsquet Sant Antoni, tuvo una gran actuación disputando finalmente 24 minutos, en los que firmó quince puntos, nueve rebotes y tres asistencias para contabilizar 23 créditos de valoración. El ala-pívot nacido en Algeciras, con pasado en la cantera del Unicaja Málaga, rebaja la euforia porque, como advirtió, “nos enfrentamos a uno de los mejores equipos de la competición, que cuenta con jugadores de muchísima calidad, veteranía y experiencia”. Por tanto, y reconociendo que disponen de una gran ventaja de 22 puntos, considera que “no tenemos que relajarnos. Es una gran diferencia pero, con un rival como Ibiza, somos conscientes que ellos no van a dar el partido por perdido”. Así que asegura que deben afrontar el choque “con la mentalidad de ir 0-0, aunque por suerte arrancaremos con una importante renta”, subrayó.
Tratando de buscar una explicación sobre el cambio que experimentó el Melilla Baloncesto de una parte a otra, Godspower cree que a los suyos les pudo pesar “los nervios y mucha responsabilidad individual, a lo que se sumó el gran acierto que tuvieron ellos en el tiro”. Aun así, como destacó, “seguimos demostrando el equipo que somos porque al fin y al cabo anotamos 51 puntos, algo difícil de hacer”. Y es que, según el interior azulón, “simplemente nos faltaba ajustar un par de cosas que hicimos en el descanso, y cuando empezamos a confiar uno en el otro como siempre hemos hecho y a seguir el plan de partido estrictamente como lo habíamos planeado el resultado llegó”. También indició en los excelentes porcentajes que consiguieron desde la línea de tres puntos, “casi un 60% que no es algo habitual, pero así lo hicimos y también hay que contar con ello”, resaltó. En lo personal, admite que ha tenido “una temporada con altibajos”, porque “al final es complicado jugar en un conjunto que desafía tanto, pero lo cierto es que me he sentido bastante respaldado por mis compañeros y sobre todo por mi staff, y eso hace que en este momento decisivo de la temporada esté jugando a un buen nivel y sea capaz de hacer y dar lo que el equipo necesita”.
Por último, y acerca de la posibilidad de lograr el ascenso este sábado en tierras baleares, Jeffrey Godspower lo califica como “algo único”, dado que “no todo el mundo tiene la oportunidad de vivir o jugar finales, incluso estar en el lugar que estamos nosotros ahora. Y yo pienso que es un sueño, un sueño en el que todos hemos pensado desde pequeño, siempre seguro que nos hemos visto jugando finales o ascendiendo a cualquier liga. Y es un privilegio, un privilegio que tenemos que disfrutar y hacer todo lo posible para lograrlo en Ibiza”, concluyó el jugador del Club Melilla Baloncesto.
