El programa electoral de Izquierda Unida en Melilla incluye un Plan Integral de Mejora de la frontera de Beni-Enzar y sus aledaños que no sólo agilice el paso de vehículos, personas y mercancías, sino que también ordene el comercio, las operaciones de carga y descarga de mercancías poniendo fin a la situación "tercermundista" que dicen ofrece en estos momentos el principal paso fronterizo entre la ciudad y Marruecos. Los candidatos de Izquierda Unida Melilla trasladaron ayer la campaña a la zona próxima a la frontera de Beni-Enzar al objeto de entregar a los comerciantes y residentes en la zona, información con las propuestas con las que esta formación espera lograr el respaldo de los melillenses en las elecciones del domingo. María Perez, integrante de la candidatura de IU, explicó que además de repartir propaganda electoral, el objetivo de esta visita a la zona era conocer de primera mano también las necesidades y reivindicaciones de los vecinos de la zona.
Indicó que la formación incluye en su programa electoral "un plan integral de fronteras que no sólo agilice el paso de vehículos, personas y mercancías, sino que también ordene el comercio, las operaciones de carga y descarga de mercancías eliminando la situación actual de la frontera que es tercermundista, llena de suciedad", dijo.
Rosendo Quero manifestó por su parte, que la ordenación de la frontera es un tema que también afecta a la ordenación urbanística de la zona, "porque existe un solar como es el antiguo Cuartel de Valenzuela que es un descampado lleno de basuras y escombros que hay que ordenar urbanísticamente" para lograr que el "tráfico vaya ordenado", que se regule las operaciones de carga y descargas de mercancías eliminando la suciedad que se acumula. El objetivo, "que haya un orden para que el tráfico de un lado y otro (de la frontera) fluya bien, ordenadamente, no que cada uno vaya a su libre albedrio con esas colas que se forman que llega hasta el mercadillo", manifestó.
El responsable de la formación de izquierdas en la ciudad indicó que este caos en la zona también repercute en los vecinos y residentes, porque las operaciones de carga y descarga "les impiden salir de sus casas, por lo que hay que regular" estas operaciones de los comerciantes "con horarios y un espacio físico para facilitar a los comercios su trabajo y venta de mercancías".
