El Ministerio del Interior ha condecorado a los ocho guardias civiles que estuvieron imputados por su actuación en el perímetro fronterizo durante un salto de la valla que se produjo en 2014, sólo 10 días después de que la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Málaga, con sede Permanente en Melilla, decretara el sobreseimiento definitivo de su causa. Todos ellos recibieron la Cruz de la Orden del Mérito de la Guardia Civil con distintivo blanco de la mano del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que también condecoró a quien hasta el pasado mes de enero fue el jefe del Cuerpo en Melilla, el coronel Ambrosio Martín Villaseñor, con la Cruz de Plata de la Orden del Mérito de la Guardia Civil. La entrega de estas condecoraciones se produjo el acto del 172 aniversario de la Guardia Civil en Valdemoro (Madrid). El ministro del Interior afirmó en su discurso que los ahora condecorados “han sufrido un penoso incidente”. Se trata de cinco guardias civiles destinados en la Comandancia de Melilla y tres de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) que estaban en ese momento prestando servicio en la valla (entre ellos un comandante y un teniente). Interior les ha concedido la Cruz al Mérito de la Guardia Civil con distintivo blanco, que no conlleva pensión.
La causa contra ellos, ahora archivada definitivamente por la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Málaga, tenía que ver con su actuación durante el salto de la valla de Melilla que se produjo el 15 de octubre de 2014, y los golpes que recibió un inmigrante (identificado por las ONG denunciantes como el camerunés Danny) cuando descendía del enrejado, según mostraba un vídeo de la ONG Prodein, que el auto llegó a calificar como sesgado.
Aunque no estaba incluido en la redacción original de su discurso, el ministro se detuvo en su alocución en destacar el trabajo que realizan los guardias civiles de Melilla y en especial quien hasta el pasado enero era su máximo responsable, el coronel Ambrosio Martínez Villaseñor, actualmente en la reserva.
“Permítanme que singularice la enhorabuena en el coronel que ha estado al mano de la Comandancia de Melilla”, dijo Fernández Díaz antes de compartir una “referencia personal”: “Han sido innumerables las veces en estos años los SMS con los que me despertaba por la mañana que me mandaba el director del Cuerpo (Arsenio Fernández de Mesa) en los que se hacía referencia a las novedades de la vigilancia del perímetro fronterizo de Melilla que delimita la soberanía de España. Todos esos mensajes terminaban con ‘Villaseñor’”.
“Especial vinculación”
“Por ello -continuó el ministro- he tenido con el coronel Ambrosio Martínez Villaseñor una especial vinculación”. Fernández Díaz recordó la “serie interrumpida de acciones que lo que hacían era intentar en el marco de la Ley defender la soberanía nacional y luchar contra las mafias que trafican con la desesperación”.
El coronel Villaseñor llegó a estar también imputado en los tribunales denunciado por las ONG por llevar a cabo el rechazo en frontera de los inmigrantes que trataban de saltar la valla. Finalmente se archivó la causa.
El Gobierno introdujo en la Ley de Seguridad Ciudadana una disposición final que a su vez modificaba la Ley de Extranjería con la que se autorizaba el rechazo en frontera de inmigrantes: si no logran traspasar por completo el perímetro de seguridad de la frontera (incluyendo la fila de guardias civiles) pueden ser devueltos en ese mismo momento a Marruecos sin necesidad de ser ingresados en un Centro Internamiento de Extranjeros (CIE) como marca la Ley cuando logran llegar a territorio español.
Al finalizar el acto, el ministro del Interior en funciones y el director general de la Guardia Civil se hicieron una fotografía con los agentes de Melilla condecorados. El ministro mostró especial interés en que la imagen se tomase de tal modo que tras ellos se pudiese leer la frase “El honor es tu principal divisa” grabada en lo alto del edificio que estaba tras ellos.
