El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, confirmó ayer la noticia adelantada por MELILLA HOY respecto adjudicación del contrato marítimo a la compañía Trasmediterránea, que se ha impuesto a las propuestas de Baleària y Naviera Armas con una oferta económica de 7,6 millones de euros, un 70% menos del presupuesto que había destinado el Ministerio de Fomento, que era de 25 millones. Imbroda, a preguntas de los periodistas, dijo que se enteró de esta noticia el miércoles al mediodía gracias a una llamada de la secretaria general de Transportes del Ministerio de Fomento, que le confirmó que los técnicos habían visto viable la propuesta de Trasmediterránea pese a esta enorme rebaja. Asimismo, dejó claro que aunque la compañía sea la misma que está operando ahora las líneas de interés público que conectan Melilla con Málaga y Almería, el cambio que va a experimentar el transporte marítimo de nuestra ciudad será “como de la noche al día”. Imbroda recordó que los barcos que ha propuesto Trasmediterránea para el pliego de condiciones son el 'Sorolla' y el Fortuny', los dos mejores buques de su flota, construidos en 2001 que pueden navegar a 23,5 nudos de velocidad. “Son muchos nudos”, apuntó el mandatario local antes de apuntar que para las épocas de refuerzo, el barco de alta velocidad que ha propuesto esta compañía es el Milenium Dos, “el mejor de los Milenium, según dicen ellos”, que es capaz de hacer las travesías a 35 nudos.
“La diferencia es enorme con los que había, aunque sea la misma compañía”, dijo Imbroda al recordar que en la actualidad las líneas de interés público de Melilla están operadas por el 'J.J. Sister', que fue botado hace 26 años, y el buque 'Las Palmas de Gran Canaria', que tiene ya 23. Además, estos dos barcos tienen una menor capacidad en comparación con los “superferries modernos” por los que serán sustituidos a partir del 1 de mayo, día en que empezará a operar el nuevo contrato marítimo.
Según ha podido saber este Diario, la adjudicación se hará oficial la semana que viene con su publicación, y a partir de entonces Trasmediterránea tendrá un plazo de 10 días para presentar toda la documentación necesaria para firmar el nuevo contrato marítimo, cerrando así una etapa de dos años marcados por los dos intentos fallidos de adjudicación tras quedar desiertos los concursos, los recursos presentados desde Motril en el tercer pliego y la necesidad de analizar técnicamente las tres ofertas presentadas debido a su enorme rebaja respecto al presupuesto.
En este sentido, Imbroda explicó que la oferta de Trasmediterránea ha recibido las bendiciones de los técnicos, entre los que se encuentran el interventor y el abogado del Estado y un catedrático de Ingeniería Naval. “Supongo que sabrán de navegación”, apuntó el presidente melillense tras asegurar que desde la Ciudad Autónoma se va a exigir que la compañía adjudicataria cumpla “exactamente” la propuesta que ha planteado ante la Marina Mercante. “Estoy seguro de que así va a ser en todos los extremos del pliego”, apuntó.
Según le transmitió la secretaria general de Transportes, todos los técnicos dieron luz verde a los informes presentados por la compañía y ven posible que pueda cumplir con las exigencias del pliego de condiciones por 7,6 millones de euros para los dos años de vigencia del contrato.
Para Imbroda, la clave de esta “baja fenomenal” hay que encontrarla en la competencia entre las empresas privadas que se han presentado al concurso de adjudicación. Ahí está la respuesta a “la sorpresa” que ha causado la oferta de Trasmediterránea de 7,6 millones para los dos años, menos de la mitad de los 15,4 millones que tenían los dos pliegos que quedaron desiertos. “Algo falla, pero no por parte de la administración, ni por nosotros, son empresas privadas”, apuntó Imbroda, que como presidente melillense “se queda” con lo que ya hay seguro para Melilla, como son “dos barcos mejores y un nuevo contrato que es mejor”.
Todo ello permite “un salto cualitativo imponente con lo que había antes”, aunque no haya cambio de compañía al frente de las líneas de interés público. Por eso cree que si alguien siente decepción, es porque había apostado por que ganaría otra compañía, ya que las características de los buques eran muy similares entre las tres compañías en sus características.
La línea de Motril
Además, Imbroda opinó que tras la adjudicación del contrato marítimo, los melillenses “van a estar estupendamente comunicados” tanto por mar como por aire. No en vano, el presidente cree que la Naviera Armas seguirá operando la línea de Motril “porque la vocación está ahí dada”, habida cuenta que ha reforzado la ruta con el barco rápido Volcán de Tirajana, antiguo Milenium Tres.
Eso significará que en Melilla operarán los mejores barcos de Trasmediterránea y de Naviera Armas, esto es, el Sorolla, el Fortuny, el Milenium Dos, el Volcán de Tinamar y el Volcán de Tirajana. “¿Qué más vamos a pedir?”, se ha preguntado Imbroda, convencido de que “nunca hemos estado en la vida como vamos a estar en comunicaciones”, teniendo en cuenta que en el transporte aéreo también están operando dos compañías importantes, como son Air Nostrum y Air Europa, y a la espera de que se reincorpore Melilla Airlines.
