Un día después de viajar a Ceuta, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, llegará hoy a Melilla para hablar “fundamentalmente” del problema de la inmigración, aunque el presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, aprovechará la ocasión para poner sobre la mesa otros temas que también competen a este Ministerio, como es la frontera con Marruecos. Imbroda avanzó ayer que hablará con Fernández Díaz sobre la posibilidad de más desarrollo fronterizo con acciones como, por ejemplo, la apertura de un nuevo paso que alivie la carga que ya tienen los otros cuatro. El mandatario local recordó que en Melilla tenemos “una frontera que depende de él” -en alusión al ministro del Interior-, “y esa frontera no es solo para que no se deje pasar a los ilegales, sino que también da vida cultural, social y económica y es muy importante” para el desarrollo de nuestra ciudad.
Es por eso que la presencia de Fernández Díaz en Melilla es tan importante, destacó Imbroda, que también expresará al ministro el apoyo del Gobierno local a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, fundamentalmente a la Guardia Civil “por el trabajo abnegado, sacrificado y penoso que hace en la frontera, y muchas veces sin medios o con menos medios de los que debería tener”, tanto humanos como técnicos. También mencionó ese apoyo a la Policía Nacional, puesto que “hace un trabajo espléndido en los pasos fronterizos”, a pesar de que “es un trabajo muy penoso y muchas veces con determinado riesgo”.
Pero en la reunión entre Imbroda y Fernández Díaz se hablará “fundamentalmente” de inmigración. Según dijo el presidente melillense, el ministro vendrá a la ciudad para contar las medidas que ha pedido a la Unión Europea en su encuentro con la comisaria de Interior, a la que “ha puesto las cosas claras, con rotundidad y firmeza para que todos hablemos el mismo lenguaje y tengamos el mismo conocimiento de causa”.
Las medidas
Imbroda se mostró convencido de que la visita del ministro “va a ser muy fructífera”, puesto que además “es un gran amigo de Melilla y no es la primera vez que viene”. Además, reiteró su convencimiento de que la presión migratoria que sufre Melilla remitirá cuando Marruecos admita el rechazo de los inmigrantes irregulares con la aplicación del Acuerdo de Readmisión, y se regule la inmigración “ordenada y legalmente para que las mafias no ganen dinero a costa del sacrificio y el esfuerzo de los demás”.
También es necesario que la Unión Europea “ayude a los países que están produciendo estos inmigrantes” y se dote las fronteras con los medios suficientes para que la Guardia Civil pueda hacer su labor “sin ningún tipo de problema”, dijo Imbroda. Sobre este aspecto, el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, reiteró en otra comparecencia que “el tema de la inmigración no se va a acabar elevando más metros la valla ni poniendo un guardia civil en cada metro”, sino que es necesario “tomar iniciativas desde distintos niveles”, como por ejemplo, desde la UE y con acuerdos con los países relacionados con las mafias.
El Barkani también se refirió a la visita del ministro, de la que dijo que “es muy bueno que muestre su preocupación y compromiso” como ya hizo en su anterior visita de verano de 2012. “En estos momentos que hay un enorme crecimiento de la presión migratoria, ha querido estar con Ceuta y con Melilla”, siguió diciendo El Barkani, que reiteró los anteriores movimientos de Fernández Díaz para intentar solucionar este problema, como fue su reunión de hace unos días con sus homólogos de Marruecos, Portugal y Francia, que habitualmente colaboran con España en la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y la inmigración.
“Viene a estar con los melillenses, a mostrar su apoyo y no hace falta que lo demuestre, porque lo ha hecho desde hace tiempo”, aseveró el delegado del Gobierno, que dio por buena la cifra de 80.000 inmigrantes esperando en Marruecos y Mauritania que dio esta semana Fernández Díaz. “El ministro está muy bien informado. Si lo ha dicho es que es verdad”, señaló El Barkani, para quien “no es descabellado” que en el país vecino haya esa cantidad de inmigrantes esperando para entrar.
Reprobación
Por último, tanto Imbroda como Barkani coincidieron en criticar la “absoluta irresponsabilidad” del PSOE en su anuncio de reprobación al ministro del Interior. El delegado rechazó las acusaciones de culpabilidad contra la Guardia Civil, pues el riesgo forma parte del “trabajo de las mafias”. Por su lado, Imbroda se mostró convencido de que al PSOE “le costará caro” su postura en este asunto desde el punto de vista electoral en los próximos comicios.