El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, acusó ayer al PSOE y al Gobierno de Sánchez de «mentiras, falsedades y trilerismo barato» en la gestión sobre la obra de construcción del Hospital Universitario, después de que el Consejo de Ministros aprobara el viernes la encomienda de gestión a Tragsa. A preguntas de los periodistas, Imbroda mostró su alegría de que se haya aprobado este asunto, pero dedicó su aplauso «al PP y a la gestión que ha hecho sobre el Hospital». Así, subrayó que para lograrlo «ha habido aquí mucha gente que ha luchado mucho por esto», y entre otros destacó la figura del que ha sido en los últimos años el director territorial del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), Francisco Robles.
De esta manera, Imbroda negó los méritos que el Gobierno socialista se ha atribuido afirmando que estas obras llevaban seis años paralizadas, ya que recordó que el anterior Ejecutivo tuvo que «desmadejar el lío que había montado» el Gobierno de Zapatero.
«Lo hemos pasado muy mal», afirmó el presidente melillense para precisar que hubo que esperar 4 años a que los tribunales resolvieran dos cuestiones relativas al Hospital Universitario, una de ellas la adjudicación de un proyecto modificado de casi el 20% que el PP se encontró «sin firmar y sin aceptar fehacientemente» al llegar al Gobierno.
«No había un técnico en el Ministerio que firmara este modificado por 8 millones más a una empresa a la que se le adjudicó la obra por 41», resumió Imbroda «el pollo que nos metieron», en alusión al Gobierno de Zapatero. Asimismo, recordó que éste también fue condenado por la Justicia por una adjudicación irregular de la dirección facultativa.
Por ello, Imbroda dejó claro que «esa es la verdad y lo demás es una falacia, una falsedad y una mentira», y puntualizó que el PSOE «lo que ha hecho es encargar a Tragsa la obra», un trámite que «estaba a las puertas del Consejo de Ministros» justo antes de la moción de censura.
También dejó claro que el PSOE tampoco es el responsable de la mejora del proyecto que sí hizo el anterior Gobierno de Rajoy, permitiendo que la inversión pase de 41 a 89 millones, lo que sumado a los 30 millones ya invertidos, eleva el presupuesto a los 120. Es decir, «un pedazo de hospital que es el que se merecían los melillenses», y que estará listo en 36 meses, señaló Imbroda.
